Las tropas leales a Basher al Asad avanzaron y recuperaron posiciones que habían estado en manos del Estado Islámico, tras el último y más incisivo apoyo de la Fuerza Aérea de Rusia, que parecen no hacer caso de las últimas críticas de la Unión Europea, cuyos ministros de Defensa exigen que retire su apoyo al Gobierno sirio.
Bajo el punto de vista de Bruselas, el principal blanco de los bombardeos no son los terroristas del autoproclamado Estado Islámico, sino los rebeldes sirios que cuestionan el Gobierno de Al Assad, con el que Europa se muestra reticente a la hora de abordar una transición en Siria, aunque no cierran las puertas del todo.
Rusia comenzó a finales de septiembre sus ofensivas aéreas contra las posiciones del Estado Islámico, así como de "otros grupos terroristas" que operan en la región. Desde entonces se han producido ataques aéreos a diario, mermando, y según fuentes de Moscú, tanto posiciones como infraestructuras del grupo terrorista.
En las últimas 24 horas, Rusia habría bombardeado 53 objetivos terroristas en Siria en las provincias de Homs, Latakia e Idleb, antiguos bastiones del Gobierno y actualmente en manos de los terroristas, que en los últimos meses intentan hacerse con el control total de Hama, en donde ansían el control del estratégicovalle de Sahl al Ghab.
Es el caso también de Latakia, en la costa mediterránea, así como de Idleb, ciudad en el noroestecontrolada por una alianza de milicias islamistas, entre las que está el Frente al Nusra, una filial de Al Qaeda.El Ejército sirio recupera posiciones
La televisión pública siria ha informado de que las tropas de Al Asad tomaronla localidad de Kafr Nabuda en la provincia de Hama, tras los bombardeos rusos y una escaramuza militar siria en la que también habrían participado milicias chiíes de Hezbolá y fuerzas iraníes.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) ha confirmado la toma deKafr Nabuda tras "más de 20 bombardeos rusos", en la que supone la ofensiva "más encarnizada" desde que Moscú iniciara su campaña aérea el 30 de septiembre.
El objetivo de Damasco ahora está enJan Sheijun, una pequeña ciudad en el oeste de Siria situada en medio de una ruta estratégica entre el norte y sur del país.Europa y EEUU acusan a Rusia de extender el conflicto
En una reunión mantenida este lunes en Luxemburgo, los ministros de Defensa de la Unión Europea han mostrado su rechazo al apoyo que el Gobierno de Vladimir Putin está ofreciendo al sirio y pidieron que "cese inmediatamente" los ataques contra los rebeldes considerados "moderados".
"Esta escalada militar amenaza con prolongar el conflicto, socavar el proceso político, agravar la situación humanitaria y aumentar la radicalización", afirmaron, a la vez que subrayaban la imposibilidad de "una paz duradera en Siria con el Gobierno actual" de Al Asad.
Estados Unidos y sus aliados -Francia, Arabia Saudí o Qatar, entre otros-, contrarios al Gobierno sirio, acusan a Rusia de intereses espurios y de asistir a Al Asad, más que intentar acabar con el Estado Islámico y los terroristas.Washington, que inició sus ataques contra los yihadistas hace un año, suministró este domingocon paracaídas y municiones a las fuerzas rebeldes sirias del norte del país, cuyos líderes, tal como anunció este lunes un portavoz del Comando de las Fuerzas de EEUU en Medio Oriente (Centcom), fueron "verificados", en un intento por aplacar las últimas críticas recibidas tras comprobarse que muchos de los milicianos que habían estado entrenando y financiado acabaron militando posteriormente en el Estado Islámico.
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