Trump anuncia la muerte del 'nuevo' líder de ISIS... pero hay otros candidatos

ISIS proclamó su califato en el mes de julio
ISIS proclamó su califato en el mes de julio

El ejército estadounidense ha acabado con la vida del portavoz del ISIS, Abu Hasan al Muhayir, posible sucesor del recién asesinado líder de Estado Islámico, AbuBakr al Baghdadi. El propio Donald Trump ha anunciado la muerte del último 'favorito' a la dirección del grupo terrorista, aunque el "desmantelamiento efectivo" de la cúpula del ISIS que pregona el presidente de EEUU ha sido desmentido por numerosos analistas, que apuntan a la existencia de potenciales líderes y aseguran que acabar con la 'reina' no significa destruir el avispero.

Trump sostiene en su mensaje que la muerte del segundo de Al Baghdadi supone la estocada final a la jerarquía del grupo terrorista: "Acabo de confirmar que el favorito para reemplazar a Al Bagdadi ha sido aniquilado por las tropas estadounidenses. Lo más probable es que hubiera asumido su liderazgo, ¡y ahora también está muerto!". Por su parte, varios especialistas consultados por 'Al Jazeera' señalan dos nuevos nombres que podrían asumir el liderazgo del grupo: el tunecino Abu Othman al-Tunsi y el saudí Abu Saleh al-Juzrawi, también conocido como Hajj. Abdullah. 

Del primero se conoce su papel como cabecilla del Consejo Shura del ISIS, un organismo legislativo de carácter consultivo, según explica el experto en yihadismo Hisham al-Hashemi al medio qatarí. Mientras que Hajj Abdullah ejerce el control de brazo ejecutivo del grupo, el denominado Comité Delegado. Sin embargo, para el especialista estas posiciones de poder no suponen ninguna garantía  para su ascenso en la cadena de mando, ya que ninguno de los dos es de nacionalidad siria o iraquí, 'cuna' de la organización yihadista, los que "podría conducir a deserciones" entre los combatientes oriundos de esa región.

Además de los dos miembros más destacados, el académico experto en yihadismo Aymenn Jawad Tamimi ha sacado a la luz un nuevo aspirante del que apenas se tienen datos. Se trata de Hajj Abdullah, un esquivo componente del grupo terrorista: "Aparece en documentos filtrados de Estado Islámico como diputado de Baghdadi y que yo sepa, no está muerto", indica Tamimi. A excepción de algunos documentos que mencionan su nombre, del tercero no se tienen más noticias después de su antiguo papel como emir del Comité Delegado, que es el órgano rector general.

A pesar el optimismo internacional que ha seguido al anuncio de la muerte de Al Baghdadi, voces especializadas apuntan a que su relevancia es más simbólica que efectiva. Andreas Krieg, profesor asistente del Departamento de Estudios de Defensa del King's College de Londres, asegura que durante años, la expansión de la base ideológica del Estado Islámico ha convertido a la organización en "una especie de Califato virtual, una franquicia que otros grupos pueden comprar y vender en todo el mundo". En definitiva, que esta imagen comunitaria de la cruzada yihadista ha crecido sin líder y no necesita personalizar su poder en ninguna persona física para seguir respirando.

Segundo asalto a la cúpula

Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), alianza liderada por kurdos y principal aliado de Washington en su lucha contra ISIS, ya anticiparon el pasado domingo que Al Muhayir había muerto en una intervención de la fuerza estadounidense distinta a la que el sábado acabó con Al Baghdadi, en el enclave de Ain al Baida: "Las dos operaciones lideradas por EEUU han desmantelado de forma efectiva la cúpula del EI que se escondía en el noroeste de Siria. Hay más que aún se esconden en la misma área", indicó el portavoz de las FSD, Mustafa Bali.

La mano derecha de Al Bagdadi estaba casado con su hija y era considerado "uno de los posibles sucesores" del cabecilla. Estaba previsto que el dirigente del grupo terrorista anunciase a su sustituto en el transcurso de "algunas semanas", según un funcionario estadounidense consultado por 'The Wall Street Journal'. El ejército de EEUU se anticipó al nombramiento y liquidó a Al Muhayircon en un ataque aéreo al noreste de Siria.

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