El Ejército tailandés ha puesto en libertad a la ex primera minstra Yingluck Shinawatra, retenida desde el pasado viernes en el marco del golpe de Estado militar, según han informado a la cadena CNN fuentes cercanas a Yingluck.
La ex primera ministra de Tailandia, Yingluck Shinawatra fue detenida hace dos días en un cuartel militar, tras comparecer ante la Junta que ha dado un golpe de Estado.
El medio tailandés Naew Na informa de que Yingluck está siendo trasladada a un cuartel de la provincia de Saraburi, aledaña a Bangkok. Yingluck, forzada a dimitir hace dos semanas por el Tribunal Constitucional que la consideró culpable de un delito de abuso de poder, es una del más de un centenar de personalidades que la nueva Junta militar birmana citó hoy en el Club del Ejército en Bangkok, bajo orden de arresto si no cumplían.
Desde que la asonada lajunta militar de Tailandia ha citado a declarar apolíticos e intelectuales prodemocracia a comparecer ante la nueva autoridad del país, que mantiene lapersecución contra opositores y críticosiniciada tras elgolpe de Estado de hace dos días.
También ha amordazado a la prensa, con cierres de radios y televisiones, y ha empezado a clausurar portales de internet críticos con el golpe como el de Human Rights Watch, según denunció el representante de la organización en el país a través de Twitter.Plenos poderes del ejército
La intervención militar se produjo después de ocho meses de protestas para derribar al Gobierno, que han costado 28 vidas humanas y más de 800 heridos. Menos de 24 horas después del golpe de Estado, el duodécimo de la Tailandia democrática, los campamentos de los manifestantes antigubernamentales y progubernamentales en Bangkok se desmantelaron y sus ocupantes regresaron a sus casas.
En los últimos días lajunta militar también ha derogado la Constitución, ha disueltoelSenadoy apartó de sus funciones a tres altos cargos con responsabilidades en seguridad considerados próximos a la corriente política del Gobierno depuesto y su líder,Thaksin Shinawatray creado un nuevo Gobierno formado por generalesque pretende realizar reformas políticas y económicas sin que de momento haya puesto un plazo para devolver el poder a un Gobierno civil.
Además, se ha decretado un toque de queda desde las diez de la noche a las cinco de la mañana, se han prohibido las reuniones públicas de más de cinco personas y se ha amordazado la prensa, con el cierre de canales de radiotelevisión y la amenaza de clausurar cualquier medio que provoque agitación.
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