Las primarias en Latinoamérica, un fenómeno reciente instaurado por ley

Si en Estados Unidos las primarias son una tradición centenaria, en el sur del continente se trata de un fenómeno reciente, que comenzó a surgir entre los años 80 y 90 del siglo XX. Las primarias latinoamericanas reciben diversas denominaciones y concentran una amplia tipología que va desde las elecciones internas libres, en las que puede participar cualquier votante registrado de cualquier partido; hasta las globales, que permiten elegir a los candidatos por cargo, sin importar la afiliación; pasando por la fórmula eliminatoria, en la que el voto no está limitado al partido y los dos candidatos con más votos van a las elecciones generales, independientemente de la formación.

El modelo más extendido en el continente es, sin embargo, el de las primarias cerradas o 'techadas', en las que sólo pueden participar los militantes inscritos en el partido en el que se han registrado previamente.Argentina

En Argentina, las primarias son abiertas y obligatorias desde que se introdujera en 2009 la Ley Electoral nº 26.571, conocida como Ley PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias). La ley estipula que todo ciudadano argentino que tenga 18 años o más tiene "el derecho y el deber cívico de votar en las elecciones primarias".

En Argentina no existen elecciones primarias abiertas tal y como se entienden en Europa, sino que son simultáneas. Es decir, se vota al mismo tiempo al candidato y al partido, lo que sirve como un primer filtro de cara a las presidenciales.

La reforma electoral también regula que podrán votar tanto los afiliados a algún partido político como el resto de ciudadanos.

La primera vez que se celebraron primarias abiertas en Argentina fue el 14 de agosto de 2011, donde se conocieron los candidatos para la carrera presidencial. Participaron casi 23 millones de ciudadanos, que equivalen a un 81,41% de los electores habilitados.Chile

La Concertación, es decir, la coalición de centro-izquierda chilena que gobernó el país latinoamericano durante 20 años después de la dictaruda de Pinochet, ha experimentado con distintas fórmulas primarias desde los años 90: cerradas, abiertas, semiabiertas...

La derecha, sin embargo, se negaba a este proceso. Pero una ley promulgada en 2013 le hizo cambiar de opinión: por fin se aprobó un proceso de primarias abiertas, que se estrenó en verano del año pasado. Este nuevo mecanismo se aplica a dos grupos principales, y en cierto modo fomentan el bipartidismo. Pueden votar todos los ciudadanos chilenos, salvo los militantes de partidos que no pertenecen al conglomerado que hace primarias.Honduras

Este país latinoamericano ha sido uno de los más recientes en incorporar el mecanismo de elección interna a través de primarias. La Ley Electoral hondureña ha sido sometida a más de una treintena de reformas. En 2009, se estableció que todos los partidos deberían celebrar primarias un año antes de las elecciones generales. Este proceso es cerrado (sólo pueden participar los militantes de los partidos) y los pueblos originarios no pueden votar en ellas, lo que sigue considerándose una violación de sus derechos.

El pasado 19 de enero, la Cámara hondureña aprobó otra modificación de la Ley, que establece que las primarias y las generales se celebrarán el mismo año para evitar "proselitismo"; lo que significa que a partir de 2017 ambos comicios tendrán lugar en fechas muy cercanas.Venezuela

Pese al déficit democrático que muchas veces se ha achacado a la República Bolivariana, dirigida ahora por el 'sucesor' directo de Hugo Chávez, Nicolás Maduro, el partido de la oposición sí que ha celebrado comicios internas para escoger a su candidato. Fue el caso de la elección de Henrique Capriles, que en 2012 se escogió como candidato de Primero Justiciaa la Presidencia de la República a través de voto universal y popular. Más del 17% de todo el censo de votantes del país participó en el proceso.