OPINION

Cuando el PSOE anunció el mayor recorte social de la historia

Pedro Sánchez durante la primera sesión de control al Gobierno
Pedro Sánchez durante la primera sesión de control al Gobierno
EFE

El 12 de mayo de 2010, la prensa española llevó a sus titulares una insólita noticia: "El gobierno del PSOE pone en marcha el mayor recorte social de la democracia". Los salarios de los funcionarios se bajaron un 5%. Las pensiones se congelaron, el cheque bebé fue suspendido, y el gasto en dependencia, una de las banderas del gobierno socialista, sufrió severas amputaciones.

Ese miércoles 12 de mayo, Zapatero se dirigió a los españoles como Churchill en la Segunda Guerra Mundial: habló de "duras medidas, sacrificios y esfuerzo importante".

Era el sexto año de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y quedó para la historia también como el año de los recortes en los derechos laborales. Se redujo la indemnización por despido de 45 días a 33 días por año trabajado, pero también a 22 días si las empresas tenían pérdidas o preveían tenerlas. Se facilitó el despido por absentismo laboral y los parados que no tomaran cursos de formación serían sancionados. A las empresas se les permitiría descolgarse de algunas cláusulas del convenio colectivo.

El diario El País lo resumió así: "Cinco millones de pensionistas, 2,8 millones de funcionarios, cientos de miles de ancianos necesitados de asistencia y los 400.000 nuevos padres de 2011 sufrirán en sus bolsillos las consecuencias del recorte. Las constructoras perderán un negocio de 6.000 millones de euros en obra pública y los países en vías de desarrollo dejarán de recibir 600 millones de euros de la cooperación española". 

El país entero quedó en shock. El mismo shock que produce al escuchar ahora al nuevo presidente de Gobierno Pedro Sánchez cuando habla de "la reforma laboral del PP", a la que tarde o temprano piensan retocar o derogar, cuando afirma que se "va a remangar para garantizar las pensiones", o cuando menciona que van a recuperar el gasto social.

¿Cómo dice? Fueron ellos quienes pasaron a la historia por el mayor recorte de gastos de la historia de la democracia y, probablemente, de toda la historia de España.

Y lo peor de todo, es que todos esos recortes de 2010 sucedieron porque los socialistas no quisieron detener la crisis a tiempo, es decir, en 2008. Seguían creyendo en 2009 que España estaba en la Champions League de las economías mundiales, lo cual provocó un déficit desmesurado del 11% del PIB que hizo temblar al euro. La economía cayó un 3,9% en 2009. La tasa de paro fue del 20,5% cuando Zapatero anunció los recortes. Se destruían 600.000 empleos al año.

Ahora, Pedro Sánchez afronta su mandato como presidente de Gobierno con las alforjas casi llenas. La economía crece casi al 3%. El déficit está por debajo del 3%. Se crea más empleo que nunca, medio millón al año, y las previsiones indican que la tasa de paro puede bajar del 15% antes de que termine el año.

Incluso cuando Pedro Sánchez menciona que el PP no le ha dejado unas buenas cuentas en la hucha de la Seguridad Social, no dice que se recauda más que nunca: 109.166 millones de euros. El problema es que eso no alcanza para pagar las pensiones, y por eso hay un déficit de 16.000 millones. Y a pesar de todo, el gobierno del PP subió las pensiones en los presupuestos de 2018.

Es decir, la economía está ahora en un momento expansivo. La nueva ministra de Economía, Nadia Calviño, anuncia un nuevo proyecto económico basado "en lo que ya se ha conseguido".

Desde el punto de vista económico, se ha conseguido mucho. La España de 2018 no tiene nada que ver con la de 2011. Si a alguien hay que colgarle el cartel de "este es el gobierno que más recortes hizo en la historia", es al PSOE, no al PP. La prueba es que el PP no ha caído porque la economía sea un desastre, sino por los casos de corrupción, pues provocaron una moción de censura que supuso el fin de su legislatura.

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