Iglesias-Sánchez, ¿Ceguera contra ambición?

Lo vuelvo a repetir: "los dioses ciegan a los que quieren perder". Podemos puede estar labrando su propio descenso si no reacciona a tiempo. Si no se decide a apoyar al PSOE acabará favoreciendo al PP y perjudicándose a sí mismo. Pablo Iglesias que me parecía listo (que no es lo mismo que inteligente) empiezo a creer que es el resultado de una coyuntura de crisis económica combinada con los dólares de la Venezuela chavista. Le han puesto una oportunidad de oro para influir en la transformación del país. Pero parece empeñado en desaprovecharla. Lo cual a mí no sólo no mi inquieta, más bien me tranquiliza ¡Allá él si quiere hundirse! Mejor para todos. El análisis es simple:

Si hubiera elecciones las encuestas dicen que el PP +C's puede ser la alternativa para Gobierno (y ya va la cuarta publicación que lo anuncia). De manera que si Iglesias dinamita la investidura de Pedro Sánchez  su capacidad de influir se verá muy disminuida. Los trenes pasan cuando pasan y si no te subes a ellos te quedas varado en la estación o en medio de la vía (que es peor). En caso de que no facilite la investidura del socialista le auguro un futuro similar al de la IU de Anguita; volverá a los 20/30 diputados dentro de cuatro años; pasados los efectos de la crisis y del glamur de la emergencia.

Si Iglesias se decide a boicotear el posible pacto PSOE+C's obliga a sus componentes a hablar con el PP. Un PP que quiere encabezar el Gobierno o provocar nuevas elecciones. En ambos casos Podemos pasa a la indigencia parlamentaria. Podrá chillar en la cámara, pero su influencia será nula. Además, con ello favorece lo que ellos ellos dicen temer más: mantener a Rajoy, y parte de sus políticas, al frente del Gobierno.

Entonces, ¿por qué podemos estira tanto la cuerda? ¿Estrategia o táctica negociadora?¿Espera llegar a un acuerdo al final, y mientras ir consiguiendo concesiones de la otra parte? O ¿Está verdaderamente ciego ante su futuro?

La ceguera de Iglesias perjudica la ambición de Sánchez

Porque si Iglesias, en su ceguera, triturase la posibilidad de apoyar a la fórmula PSOE/C's, pone a Pedro Sánchez ante la disyuntiva de apoyar a Rajoy o forzar nuevas elecciones y esa última opción aleja más al socialista de su objetivo. En ambos casos, "adiós" a sus pretensiones de llegar a la Presidencia. Por eso en el PSOE repetían que no se levantarían de la mesa. Lo que pasa es que ahora los negociadores socialistas se sienten engañados. 

¿Qué esperaban? El que elige (PSOE) una novia para casarse (C's) no puede conseguir fácilmente el favor de la amante o ex-amante despechada (Podemos). Al menos durante los preparativos de la boda; luego ya veremos. La vida, especialmente en política, da muchas vueltas.

Mientras, el presidente en funciones, Rajoy, con cachaza gallega espera "ver el cadaver de su enemigo (aquel que le llamó indecente en TV) pasando por delante de la Moncloa sumiso y cabizbajo", antes o después de las elecciones.

Por tanto si Iglesias está verdaderamente ciego a Sánchez le hará falta una gran dosis de humildad para digerir el fracaso y su ambición se verá frustrada. Pero si a Iglesias le queda un atisbo de inteligencia política llegarán a un acuerdo. Lo que tiene toda la pinta que, si ocurre, será en el último momento como el de Junts x Si con la CUP.