Un día después de que Cartes anunciara la convocatoria de un diálogo nacional para intentar poner fin a la crisis política desatada en el país en los últimos días, Alegre se ha reunido con el arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, a quien ha trasladado sus condiciones.
En primer lugar, el dirigente del PLRA ha pedido el "total esclarecimiento" de las circunstancias que acabaron con la muerte del militante Rodrigo Quintana, presidente de una sección del ala juvenil del partido que murió de un disparo en la cabeza durante el asalto de varios agentes a una sede del partido.
Por otro lado, la oposición ha exigido la retirada del proyecto para reformar la Constitución con el objetivo de permitir que Cartes vuelva a presentarse en las elecciones y, por último, que el diálogo sea convocado por una autoridad neutral, ya sea la Iglesia católica o bien, la Organización de Estados Americanos (OEA).
"Para eso hay que retrotraer lo actuado en el Congreso la semana pasada, donde en la clandestinidad dieron inicio al proyecto de enmienda", ha señalado Alegre, según recoge el diario paraguayo 'ABC'. "Creemos en el diálogo y necesitamos que el Gobierno muestre sensibilidad, compromiso y sinceridad", ha añadido.
En la víspera, Cartes convocó una mesa en la que participarían "un representante de la Conferencia Episcopal Paraguaya, presidentes de todos los partidos políticos con representación parlamentaria, presidente de la Cámara de Senadores, presidente de la Cámara de Diputados y un representante del Poder Ejecutivo".
"Los invito a abrirnos al verdadero diálogo, con respeto a nuestra patria. Paraguay nos necesita trabajando juntos, con nuestros múltiples colores, aportando en esa mesa toda la sabiduría y tolerancia que nuestro pueblo merece", indicó.
ENMIENDA CONSTITUCIONAL
La capital del país, Asunción, fue escenario de disturbios el viernes tras conocerse la decisión del Senado eliminar la prohibición constitucional de que el presidente pueda ser reelegido en el cargo.
Cartes, que llegó al cargo el 15 de agosto de 2013 tras la crisis política desatada por la destitución de Fernando Lugo por abandono del cargo, sería el principal beneficiado por esta enmienda de la Carta Magna, ya que podría concurrir a las elecciones del próximo año.
Después de conocerse la decisión del Senado, varios manifestantes se congregaron en las inmediaciones del Congreso Nacional de Paraguay y prendieron fuego al edificio cuando todavía estaban dentro algunos diputados, lo que supuso el inicio de una serie de disturbios que se saldaron con más de 200 detenidos y un líder político juvenil muerto a manos de la Policía.
Tras el suceso, Cartes cesó al ministro del Interior, Tadeo Rojas, y al comandante de la Policía, Críspulo Sotelo, comprometiéndose a esclarecer las circunstancias que rodearon a la muerte del dirigente del JLRA.
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