El psicólogo, nueva herramienta en la lucha antidopaje

Natalia Arriaga

Madrid, 20 sep.- Las federaciones deportivas dispuestas a emplear todas las armas en la lucha contra el dopaje tienen al alcance de la mano una herramienta novedosa con un alto poder preventivo: la consulta del psicólogo.

El planteamiento lo defiende un abogado madrileño de 25 años, Alberto Yelmo, en una tesis doctoral sobre la que trabaja y con la que pretende "aportar un granito de arena" a la erradicación del dopaje, una práctica que, como enamorado del deporte y triatleta popular, desprecia.

La idea de incluir a los psicólogos en los equipos de prevención no debe ser descabellada, porque ha llamado la atención de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que ha incluido la tesis de Yelmo entre los seis proyectos candidatos al Premio 2011 al Joven Investigador, dotado con 2.000 dólares y que se fallará en marzo de 2012.

"La AMA fomenta con este premio la investigación de estrategias de prevención del dopaje desde un punto de vista social", explicó Yelmo a Efe. "Yo tenía ganas de escribir una tesis relacionada con el dopaje y se me ocurrió estudiar qué efecto tendría la introducción de la figura del psicólogo en el organigrama de las federaciones y qué podría aportar a la lucha contra el dopaje".

"Creo que no hay que dar por hecho que el deporte y el dopaje van de la mano, y en esa lucha por su desaparición pretendo aportar la herramienta novedosa del psicólogo. Estoy seguro", subrayó, "de que puede aportar ideas, sobre todo en materia de prevención. Su papel sería el de educar, asesorar y dar alternativas al dopaje".

"Pero también puede ser útil a las federaciones desde el punto de vista de la detección, al darse cuenta de actitudes y conductas que revelen el uso del dopaje", añadió Yelmo, que estudio Administración de Empresas y Derecho en Madrid, hizo luego un máster en Derecho Deportivo Internacional y que acaba de empezar a trabajar en el despacho Cuatrecasas de Barcelona, en asuntos relacionados con derecho deportivo.

Aunque hay mucho escrito sobre cómo la psicología puede mejorar el rendimiento de atleta, "hay nada o casi nada, al menos en España", sobre cómo puede ayudar a prevenir el dopaje.

Alberto Yelmo elegirá un grupo de federaciones españolas y estudiará si cuentan ya con un psicólogo, cuáles son sus funciones y cómo se recibiría su implicación en la lucha contra el consumo de sustancias prohibidas.

Al tiempo, se entrevistará con psicólogos y deportistas profesionales para que le aporten sus opiniones. Entre estos, ya cuenta con la colaboración del triatleta salmantino Clemente Alonso -ganador de la última edición de Zarautz-, "que está muy involucrado en la lucha contra el dopaje".

Yelmo contempla con recelo la figura del 'entrenador-psicólogo': considera que los entrenadores están tan o más obsesionados con los resultados que los propios atletas, por lo que sus consejos no son siempre los idóneos.

"Cuántas veces hemos escuchado a un deportista que ha dado positivo aludir a las presiones de su equipo o de su entorno y decir que no le había quedado otra alternativa", destacó.

Para Yelmo, "el entrenador debe transmitir unos valores, pero a veces está tan metido en la competición que no puede".

"El psicólogo es una figura más autónoma, menos implicada en los resultados. Los entrenadores solo quieren ganar, es una batalla casi personal", apuntó.

El autor de la tesis no quiere incluir en su estudio, sin embargo, entrevistas con deportistas que hayan dado positivo.

"No quiero estigmatizar ni acusar a nadie. El dopaje es un tema grave, pero siempre hay que dejar la puerta abierta a la rehabilitación. Si hablase con algún dopado, no le mencionaría, aunque quizá utilice declaraciones ya publicadas", dijo el joven investigador.

Entre los seis candidatos seleccionados en todo el mundo para los premios de la AMA, y que también proceden de Austria, República Checa, Grecia, Suiza y Reino Unido, el organismo antidopaje distinguirá a cuatro. Los trabajos deben presentarse en enero y en marzo se anunciará la lista de ganadores. "Más que en el dinero", Yelmo piensa en "el prestigio" que le reportaría el premio y en el impulso que supondría para su corta carrera profesional.