En concreto se trataría del rol encarnado por PJ Byrne, Nicky Rugrat Koskoff, cuya caricatura "sobrepasa los límites de lo permisible", según el agraviado. Greene exige 25 millones de dólares a las productoras que participaron en la oscarizada producción, entre ellas Appia Way, perteneciente al actor de 41 años.
Por su parte, los abogados del ganador de un Oscar por El renacido argumentan que su defendido no es el autor de los guiones y que el personaje al que hace referencia el denunciante se basó en varios de los asesores y trabajadores que rodearon al protagonista de la historia. El equipo de letrados que asiste a la estrella cinematográfica no ha podido evitar que su representado se siente a declarar por este caso.
Asimismo, el realizador de la cinta y el autor del guión, Terence Winter, deberán también aportar su testimonio delante del juez. Además de la productora de DiCaprio, han sido demandadas Paramount Pictures, Red Granite Pictures y Sikelia Productions.
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