CyL es "autosuficiente" en donaciones de sangre y derivados aunque se necesita más adhesión, captación y más jóvenes

CyL es "autosuficiente" en donaciones de sangre y derivados aunque se necesita más adhesión, captación y más jóvenes
CyL es "autosuficiente" en donaciones de sangre y derivados aunque se necesita más adhesión, captación y más jóvenes
EUROPA PRESS
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Castilla y León es "autosuficiente" en donaciones de sangre y derivados de la misma, aunque los retos en la Comunidad pasan por una mayor adhesión de los donantes, una mayor captación de estos y rejuvenecer este censo, dado el envejecimiento de la población.

Así se ha puesto de manifiesto durante la firma de los convenios que renuevan la colaboración entre la Consejería de Sanidad, la Fundación Centro de Hemoterapia y Hemodonación (Chemcyl) y las hermandades de donantes para favorecer el impulso a la donación de sangre. Este acuerdo supone subvenciones por importe de casi 780.000 euros para las diez hermandades que hay en Castilla y León (747.184), así como para la Federación Regional de Donantes (30.000 euros).

El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, ha firmado un convenio con los presidentes de cada una de las diez hermandades, así como con el presidente de la Federación, Jesús Murias, con el fin de mantener esta colaboración y la promoción de una labor "altruista" y "solidaria" como supone la donación de sangre, que permite el autoabastecimiento de sangre y hemoderivados en cantidad suficiente y de "calidad" en los centros sanitarios de Castilla y León, todo ello en coordinación con el Chemcyl.

El consejero de Sanidad ha incidido en que la Comunidad es autosuficiente y se ha alcanzado un "equilibrio razonable" de donaciones y calidad de las mismas, por lo que ha agradecido el "esfuerzo altruista" de las donaciones, que ha recordado que no sólo sirven para obtener sangre para trasfusiones, sino también otros productos derivados que se emplean en "centenares" de tratamientos todos los días para pacientes con cáncer, enfermos renales o hepáticos, etcétera.

Sáez Aguado ha destacado el trabajo "impagable" de las hermandades de donantes, una labor que tiene un resultado cuantificable que refleja que en 2016 se produjeron 105.064 donaciones, lo cual permitió ser totalmente autosuficientes para cubrir todas las necesidades anuales de sangre en la Comunidad. Para conseguir esta cifra de donaciones se realizaron 5.312 colectas, 3.089 de las cuales fueron realizadas en puntos fijos y 2.223 lo fueron en puntos móviles.

Mediante la promoción directa a través de charlas, folletos, carteles, redes sociales y pagina web, se ha captado a lo largo del año a 10.419 donantes nuevos, de manera que hay en torno a 65.000 personas. A lo largo del pasado año se alcanzó un índice de donación de 42,50 por cada 1.000 habitantes, de forma se encuentra entre las primeras comunidades de España en tasa de donación (la media es de 35).

RETOS DE FUTURO

Aunque los datos son buenos, el consejero ha señalado que hay algunos "retos" en los que se pretende trabajar, en colaboración con las hermandades, que pasan por una mayor captación de donantes, pero también por incrementar su "adhesión", es decir, que acudan a donar un mayor número de veces al año, ya que actualmente la media se encuentra en 1,4 por cada uno.

En este sentido, el presidente de la Federación Regional de Donantes ha concretado que lo ideal sería que cada donante acudiera todas las veces que pueda al año (cuatro veces los hombres y tres las mujeres cada año) o, al menos, el 50 por ciento del máximo posible. "No podemos quedarnos en una donación", ha señalado Jesús Murias.

A este respecto, el titular de Sanidad ha aclarado que si se llegara al máximo que puede hacer cada uno probablemente habría "excedentes", dado que actualmente se cubren las necesidades de los hospitales públicos y se aporta también a los privados.

También en este sentido, la gerente del Centro de Hemoterapia, Lydia Blanco, ha explicado que la Comunidad se encuentra en una media de donantes que actualmente cubre las necesidades y ha aclarado que en la actualidad hay un cambio en las perspectivas de la donación porque la Organización Mundial de la Salud aconseja 40 por cada 1.000 habitantes, una tasa que se reconsidera porque gracias a los avances tecnológicos y los conocimientos las necesidades de concentrados de hematíes, por ejemplo, se han reducido, aunque se necesita más plasma.

Además, ha incidido también en la necesidad de una "regeneración" de los donantes, ya que el envejecimiento de población puede hacer que se reduzca el número de donantes menores de 60 años y ha reiterado que es "importantísima" la "fidelización".

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