Alejandro Aravena propone en Tokio "respuestas geográficas" ante catástrofes

Tokio, 26 jul.- El arquitecto y urbanista chileno Alejandro Aravena repasó hoy en Tokio sus proyectos basados en "respuestas geográficas", como bosques y zonas verdes, para paliar desastres naturales como tsunamis.

Aravena, que inauguró hoy en la Galería MA de la capital nipona la exposición "Las fuerzas en la arquitectura", dijo a Efe que para hacer frente a las catástrofes naturales una "estrategia razonable" es la construcción de bosques en las zonas más vulnerables.

"Un bosque consigue suficiente fricción como para reducir el impacto de la ola del orden de un 30 o 40 por ciento", algo que para el arquitecto es más eficiente que las construcciones defensivas que, en Japón, ya han demostrado "ser absolutamente inofensivas".

La propuesta del arquitecto chileno, jurado del prestigioso premio Pritzker, pasa por disipar la energía de la olas a través de vegetación en vez de ofrecerles resistencia, y complementarla con "construcciones condicionadas en primera línea" y planes de escape eficientes.

Aravena es desde 2006 director ejecutivo de la empresa ELEMENTAL, una de las participantes en el proyecto de reconstrucción de la ciudad de Constitución, una de las más devastadas por el terremoto y tsunami que el 27 de febrero de 2010 sacudió Chile y dejó medio millar de muertos y unos 800.000 damnificados.

El proyecto prevé la adecuación de las zonas más vulnerables de la ciudad a posibles tsunamis y la construcción de "bosques de mitigación" para hacer frente a la fuerza de las olas.

El arquitecto, que recibió premios como el León de Plata en la XI Bienal de Venecia, afirmó que el proyecto en Constitución está ya en marcha al haberse aprobado hace dos semanas la expropiación de los terrenos que permitirán construir la barrera natural "anti-tsunami".

Al reconvertir estos terrenos privado en públicos, las instituciones apuestan por proteger "el bien común y la mayoría de la población de la ciudad", algo que consideró como "una gran oportunidad de corregir los desafíos inéditos como el tsunami" y la "deuda histórica" de las ciudades con la vida urbana.

Aravena expone en la galería de Tokio, hasta el 1 de octubre, maquetas, fotografías y documentales con trabajos de los últimos 14 años, con lo que pretende mostrar "cuáles son las fuerzas en juego en la arquitectura que definen la forma de un proyecto", y en los que la gravedad y la naturaleza han sido sus señas de identidad.

"Son conceptos arcaicos que intentamos sea la base sobre la que construir nuestras propuestas", aseguró, como también lo son las intenciones con las que se desarrollan: "Su vida y su razonamiento".

Para el chileno, el desafío de los próximos años para las grandes ciudades será el enorme impacto de la migración, para lo que propone "la coordinación" de todos los agentes sociales a través de la arquitectura y el urbanismo, que "tienen una herramienta poderosa, el proyecto, que es poder de síntesis".