La Generalitat busca nuevas fórmulas de financiación para el Vall de Boí

Erill la Vall (Lleida), 13 ene.- La Generalitat busca nuevas fórmulas de financiación para el conjunto románico del Vall de Boí, que debido a los recortes presupuestarios ha tenido que despedir a siete de sus doce empleados y cerrar temporalmente al público cuatro de sus seis iglesias.

El conseller de Cultura, Ferran Mascarell, ha presidido esta mañana la reunión de la Comisión de Gobierno del Consorcio Patrimonio Mundial del Vall de Boí, donde ha hecho público el presupuesto del ente para 2012, que será de 502.000 euros, unos 100.000 menos que el año anterior.

Este drástico recorte impedirá la reincorporación de los siete trabajadores afectados por el expediente de regulación, así como la reapertura de buena parte de las iglesias que forman parte del conjunto arquitectónico, que fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad en 2000 por la Unesco.

Ante el importante ajuste presupuestario al que deberá hacer frente este año el Consorcio, Mascarell ha manifestado que se buscarán nuevas formas de financiación, centradas básicamente en el patrocinio y en convenios con el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) y la Universidad de Lleida (UdL).

También está sobre la mesa, ha dicho, la posibilidad de crear una fundación con participación privada.

En cuanto a las nuevas políticas de precios y horarios, se mantendrá el cierre de iglesias con menos visitantes, como la de Natividad de Durro o la de Sant Feliu de Barruera.

Los únicos templos que se mantienen abiertos son los de Sant Climent y Santa Maria de Taüll.

Entre tanto, según Perelada, se trabaja en diseñar un nuevo calendario de apertura que aún no está definido.

Sobre la posibilidad de que el cierre de estas iglesias pueda afectar a la calificación como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, el conseller Mascarell ha manifestado que es una posibilidad absolutamente especulativa y sin fundamento.

Ha destacado, en este sentido, que la fuerte inversión realizada en trabajos de restauración en los templos es un factor decisivo para la Unesco.

Así, pese a las actuales dificultades económicas, Mascarell ha augurado "un futuro extraordinariamente bueno" para el conjunto románico del Vall de Boí.