Un pueblo chino se gasta 66.000 euros en construir un museo y lo cierran porque exponía piezas falsas

    • Los vecinos firman que el dueño (un oficial del Partido Comunista) "compraba todo lo que le ofrecían".
    • Algunas de las 'reliquias' están firmadas con caracteres vigentes solo desde el siglo XX.
G.R.S.

Además de por su carácter expansivo, la dinastía Qing de China (1644-1912) tuvo una enorme influencia en el arte de la región. Por eso, sus creaciones artísticas son valoradas por museos y coleccionistas de todo el mundo. Sin embargo, encontrar obras originales de la época parece cada vez más complicado.

Por eso, los habitantes de la provincia de Hebei (al norte de China) pensaron que sería una buena idea abrir un museo local que recogiera algunas obras representativas de su cultura. Siempre y cuando fueran originales claro; y aunque el edificio supuso una inversión de 540 millones de yuanes (unos 66.000 euros).

Pero esta semana, las autoridades chinas han clausurado el lugar por exponer piezas falsas, incluida una vasija decorada que afirmaba tener origen en la dinastía Qing. Según recogen los medios oficiales chinos, "el museo no está cualificado al tener colecciones falsas".

Mientras la policía de investigaciones hurga en la responsabilidad de sus fundadores, se han conocido algunos detalles del engaño. La radio estatal CRI ha publicado algunas imágenes de las piezas falsas, entre las que han destacado algunas figuras de forma animal que afirmaban ser reliquias qing.

De hecho, las 12 salas del museo decían contener piezas que pertenecieron Huangdi (uno de los Cinco Emperadores que reinó en el siglo XVII a.C.). Pero el hecho de que las firmas de las obras estuvieran firmadas con caracteres simples (vigentes desde el siglo XX) ha sido la razón para que comenzase la polémica.

Corrupción y falta de control

Los ciudadanos de Hebei afirman que el dueño del museo Wang Zongquan (un oficial del Partido Comunista) "compraba todo lo que le ofrecían". Lo anterior supone que Zongquan llegó a gastar 250 euros en algunas de las piezas falsas, como explica Beijing Times.

Así que las acusaciones de los locales hacia el gasto provocado por el funcionario se unen a las críticas hechas desde el ámbito internacional al conjunto de China. No es la primera vez que empresas multinacionales han solicitado a las autoridades chinas que son demasiado permisivas en lo que se refiere a propiedad intelectual.

De hecho, Ma Waidu, una experta en antigüedades de China citada por la radio CRI explica que "se pueden encontrar museos similares en muchos sitios de China, que solo buscan obtener un beneficio económico".

Mostrar comentarios