El escritor Jed Mercurio dice "mi Kennedy es bueno como presidente, en contraste con su vida privada"

  • Barcelona.- El escritor británico Jed Mercurio recrea en su último libro, "Un adúltero americano", la figura del ex presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy al que presenta como "un santo" en su vida pública, en contraste con su vida privada, adicto al sexo y con un complicado historial médico.

El escritor Jed Mercurio dice "mi Kennedy es bueno como presidente, en contraste con su vida privada"
El escritor Jed Mercurio dice "mi Kennedy es bueno como presidente, en contraste con su vida privada"

Barcelona.- El escritor británico Jed Mercurio recrea en su último libro, "Un adúltero americano", la figura del ex presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy al que presenta como "un santo" en su vida pública, en contraste con su vida privada, adicto al sexo y con un complicado historial médico.

Acompañado por el editor de Anagrama, Jorge Herralde, el antiguo piloto de la Royal Air Force y también médico residente ha explicado hoy en Barcelona durante una larga rueda de prensa que su intención a la hora de abordar este trabajo era encontrar un personaje con una "gran contradicción entre su vida privada y su vida profesional".

Empezó a documentarse y, aunque en un principio quería centrarse en un deportista, se dio cuenta de que Kennedy era el nombre que más aparecía cuando se hablaba de personas públicas con problemas de adicción al sexo, llegándole a confiar en una ocasión al primer ministro británico Harold MacMillan que si pasaba tres días sin acostarse con una mujer sufría terribles dolores de cabeza.

Tras leer decenas de biografías y bucear durante horas en Internet, Mercurio -de padres originarios de Italia- empezó a construir este artefacto literario, que ha advertido en varias ocasiones que no es una biografía sino una novela, en la que no tiene empacho en mezclar muchas escenas de dormitorio con la crisis de los misiles de Cuba o los partes médicos que aseveraban que el presidente americano sufría la enfermedad de Addison, además de problemas de próstata, asma, rinitis e incluso osteoporosis.

El novelista ha dejado claro que le gusta la figura de Kennedy, de quien ha dicho "admirar su valor para sobreponerse a sus problemas médicos" así como "todo lo que consiguió en un corto período de tiempo como presidente". "He intentado realizar el retrato más positivo de él como presidente para poder crear el correcto contraste con su vida privada", ha apostillado.

A pesar de ello, también advierte de que no ha querido moralizar sobre la actitud mantenida por el mitificado político y que en el ámbito clínico ha mantenido largas conversaciones con uno de sus mejores amigos, psiquiatra especializado en adiciones sexuales, para determinar el tipo de enfermedad que sufría el personaje.

Por otra parte, ha rememorado que John Fitzgerald Kennedy pertenece a una época "en la que estaba muy aceptado que los hombres tuvieran aventuras amorosas" y ha agregado que fue "un hombre de su tiempo, aunque considerado un ejemplo extremo".

Incluso ha bromeado sobre el hecho de que otro presidente como Bill Clinton se habría sentido más cómodo como gobernante en esa época de la Historia cuando existía una regla no escrita respecto a que los periódicos no indagaban en la vida privada de las personas. "A él, en cambio, lo cazaron", ha recordado.

En cuanto a si hubo alguna mujer que marcara realmente a Kennedy, Mercurio sostiene que la única relación importante la mantuvo con Jackie, su esposa durante diez años, porque, al margen de ella, "no tuvo nunca una relación que durara más allá de unos meses".

Respecto a su relación con la actriz Marilyn Monroe asevera que es controvertida porque "nadie sabe exactamente que ocurrió de verdad".

Tampoco ha querido Jed Mercurio añadir "más cosas" a la teoría de la conspiración sobre el asesinato del presidente en Dallas. "Lo único conocido que enfatizo en el libro es la incapacidad que tenía de agacharse cuando estaba en el coche por un corsé ortopédico que llevaba en la espalda y que, de no llevarlo, igual le hubiera permitido esquivar la segunda bala, mortal de necesidad".

Nacido en Staffordshire (Inglaterra) hace 44 años, Mercurio, que está trabajando en el guión cinematográfico de "Un adúltero americano", se dio a conocer con el drama médico que escribió para la BBC "Cardiac Arrest" y con "Bodies", su segunda novela, también adaptada con éxito por la cadena de televisión británica.

Mostrar comentarios