Festival de La Unión presenta con éxito su Ballet Flamenco Cante de las Minas

  • El Ballet Flamenco Cante de las Minas ya es una realidad, anoche, en la segunda de las galas de la 54 edición del festival, la nueva formación estrenó su primera obra, "Alma minera", una recreación danzada de la historia de La unión, forjada en la explotación de las minas, con su tributo en tragedia humana, y en el flamenco y los cafés cantantes que proliferaron en la localidad en el siglo XIX.

Antonio Parra

La Unión (Murcia), 9 ago.- El Ballet Flamenco Cante de las Minas ya es una realidad, anoche, en la segunda de las galas de la 54 edición del festival, la nueva formación estrenó su primera obra, "Alma minera", una recreación danzada de la historia de La unión, forjada en la explotación de las minas, con su tributo en tragedia humana, y en el flamenco y los cafés cantantes que proliferaron en la localidad en el siglo XIX.

La nueva compañía de baile flamenco es un proyecto de la organización del certamen y su fundación y la Universidad Católica de Murcia (UCAM) y en su creación han colaborado numerosos músicos, bailarines, coreógrafos y artistas, que han trabajado entre La Unión y Madrid durante meses, esfuerzo recibido ayer por el público con un caluroso aplauso.

La dirección ha estado en manos de Clotilde Corví y de Beatriz Arce, la música es obra de Fran Tornero, la escenografía del pintor Esteban Bernal y las distintas coreografías que componen el conjunto han sido creadas por nombres tan importantes como Javier Latorre, Miguel Ángel Rojas, Carlos Rodríguez y Ángel Rodríguez.

Los guitarristas Francisco Tornero, Miguel Ángel García y Curro de María, el cante de Alejandro Villaescusa y un cuerpo de baile formado por nueve bailarinas y seis bailarines pusieron movimiento, voz y música a una obra con muchos atractivos que mezcla tanto la tragedia de la muerte en la mina como la alegría de vivir y la emoción del flamenco.

Los bailarines Miguel Ángel Rojas y Carlos Rodríguez actuaron como solistas invitados, el primero con una brillante e intensa farruca, excesivamente larga, y el segundo abriendo la obra con una coreografía de Javier Latorre a la que el bailarín imprimió toda su formación clásica a la hora de bailarla, con movimientos elegantes y estilizados.

Mención especial merece la participación como cantaora invitada de la malagueña Rocío Bazán, que recreó a un legendario personaje unionense, con una vida que se mueve entre la realidad y la leyenda, la cantaora de café cantante Emilia Benito, que vivió a finales del siglo XIX y comienzos del XX , pese a lo cual se ha conservado alguna grabación de sus cantes.

Una escenografía del artista local Esteban Bernal, muy funcional y simbólica, a veces minimalista, que iba cambiando con las distintas coreografías, contribuía eficazmente a los cambios de ambientes y de temperatura emocional que también marcaban las letras de los cantes y los ritmos de los bailes, en solitario o con todo el cuerpo de baile.

La noche se completó en su primera parte con la actuación del guitarrista almeriense Niño Josele, que presentó en una actuación breve los temas de su disco "El mar de mi ventana".

Josele es un guitarrista de variados registros,desde el flamenco al jazz, lo que ha mostrado a través de sus numerosas colaboraciones con músicos de distinta formación, sin embargo en La Unión su actuación se centró en su vocación más flamenca.

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