Así ha logrado Jay-Z convertirse en el primer rapero en ganar 1.000 millones

Si a Beyoncé le apodan 'B-queen', a su marido, Jay-Z, habría que llamarle 'J-king', y no porque sea su esposo, sino porque acaba de convertirse en un 'rey' de verdad, al menos en el ámbito financiero. El rapero ha sido nombrado el primer artista de su género en ganar 1.000 millones de dólares.

Ha sido la revista 'Forbes' la encargada de nombrarle como tal, y la palabra de esta publicación es casi sagrada en el terreno financiero. De este modo, Shawn Corey Carter -su verdadero nombre- ha conseguido doblar su patrimonio en apenas siete años, pues en 2012 se le calculaba una fortuna de más de 500 millones.

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Y es que Jay-Z se ha convertido en toda una institución en la música estadounidense, pues no sólo sus canciones se han convertido en grandes éxitos, sino que su labor como productor ha sido clave para hacer de su esposa una diva de la música, así como para detectar nuevos talentos, como Rihanna, a la que él descubrió.

Pero no solo por eso ha levantado un imperio de 1.000 millones,pues además tiene un buen olfato inversor que le ha llevado a lograr ganancias extra en sectores como el inmobiliario e incluso el del transporte, pues es accionista de Uber.

Para llegar a ser el rapero más rico del mundo y entrar en el exclusivo club de los 'milmillonarios', Jay-Z no lo ha tenido nada fácil. La infancia de Shawn Corey Carter en Brooklyn (Nueva York) no fue sencilla, pues su familia era muy humilde. De hecho, él nació en una vivienda de protección oficial en 1969. De niño, fue abandonado por su padre, de modo que su madre, Gloria Carter, se ocupó de criarle a él y a sus hermanas.

El suceso más grave de la vida del rapero tendría lugar en el ámbito familiar, pues hace un tiempo confesó que cuando tenía 12 años disparó a su hermano en el brazo cuando intentaba robarle un anillo. Según relató a 'The Guardian', estaba en casa de un familiar "y había armas por todas partes, me asusté y le disparé. Pensé que iría a la cárcel". Si bien su hermano fue quien se disculpó con él, pues era adicto al crack y estaba colocado en ese momento, de ahí su comportamiento con su hermano pequeño.

Jay-Z abandonó pronto los estudios porque tenía muy claro que quería dedicarse a la música, si bien en esos años, para sobrevivir, también estuvo involucrado en la venta de droga. Su nombre artístico lo adoptó del mote que tenía en Brooklyn, donde le llamaban 'Jaazy'. Fue en los 80 cuando empezó a colaborar con quien considera su mentor, Jaz-O. Además, participó y ganó varias batallas de gallos.

Pero al ver que ningún sello discográfico confiaba en él, creó el suyo propio, Roc-A-Fella Records, que le permitió grabar su primer álbum, que lanzó en 1996 bajo el nombre 'Reasonable Doubt'. A raíz de ahí, las discográficas se fijaron en él y su carrera al éxito despegó, hasta convertirse en el cantante de hip-hop más famoso de finales de los 90 y principios del 2000.

Así, se hizo mundialmente famoso y también rico, lo que le permitió convertirse también en productor, pues el sello Roc-A-Fella derivó en Roc Nation, el cual surgió de la asociación que hizo en 2008 con Live Nation, el cual desde 2013 distribuye Universal Music Group. Así, ha grabado con artistas como Rihanna, Justin Timberlake, Drake y, por supuesto, Beyoncé. De hecho, se dice que él es el culpable del éxito de su mujer tras abandonar las Destiny's Child.

Pero la música no ha sido su único negocio. Como buen inversor, Jay-Z ha sabido diversificar para tener más ingresos y ha entrado en otros sectores. Por ejemplo, tiene importantes propiedades inmobiliarias en Nueva York, sobre todo en su barrio, Brooklyn, que en estos años se ha revalorizado y convertido en uno de los barrios más caros. Además, es co-propietario de The 40/40 Club, un bar de temática deportiva exclusivo que empezó en la Gran Manzana y ahora tiene también sedes en Atlantic City y Nueva Jersey.

Por otro lado, tiene parte del equipo de la NBA de los Brooklyn Nets. Incluso intento quedarse el Arsenal inglés en 2005, pero no tenía dinero suficiente entonces. Igualmente, fundó la marca de ropa Rocawear, la cual sigue gestionando aunque vendió a Iconix Brand Group por más de 200 millones. Igualmente, es inversor de la marca Carol's Daughter, de productos de belleza para la piel y el pelo.

Pero aún hay más. Desde 2012 es productor ejecutivo del videojuego NBA 2K13, además de ser co-director de la marca Budweiser Select, y cuenta con acciones de las marcas de champán Armand de Brignac y de la de de coñac D'Usse, las cuales están valoradas en cerca de 450 millones. También tiene una participación de más de 100 millones en el servicio de reproducción de música Tidal y otra de más de 70 millones en Uber. Sin dejar fuera su colección de arte de más de 50 millones.

Así, ha llegado a sumar un patrimonio milmillonario que le ha hecho entrar ya en la historia del hip-hop y de los negocios, pues ha levantado un imperio con multitud de tentáculos gracias a la música. Por ello, hoy es uno de los hombres más poderosos de Estados Unidos e influyentes, pues usa su voz para defender los derechos de los afroamericanos, enfrentándose incluso al presidente Trump. Así, junto a Beyoncé muchos les consideran realmente la verdadera pareja presidencial de Estados Unidos.