Julio Manrique se atreve con "Roberto Zucco", de Koltès, un Hamlet moderno

  • El actor Julio Manrique, acérrimo desde hace años de Bernard-Marie Koltès, dirigirá en el escenario del Teatro Romea, a partir del próximo día 19, la obra "Roberto Zucco", la última del dramaturgo francés antes de morir de sida, protagonizada por un asesino, una suerte de "Hamlet moderno".

Barcelona, 14 feb.- El actor Julio Manrique, acérrimo desde hace años de Bernard-Marie Koltès, dirigirá en el escenario del Teatro Romea, a partir del próximo día 19, la obra "Roberto Zucco", la última del dramaturgo francés antes de morir de sida, protagonizada por un asesino, una suerte de "Hamlet moderno".

Acompañado por el elenco de actores, encabezado por Pablo Derqui, Manrique ha mostrado hoy su satisfacción por poder acometer esta obra, con un personaje central considerado como uno de los mejores del repertorio dramático contemporáneo.

A partir de unos hechos reales, basados en la historia del asesino veneciano Roberto Succo, Koltès, sabiendo que moriría en breve, construye un "thriller poético" con el que dinamita y pone en cuestión todas las instituciones sociales que vertebran el mundo, desde la familia o la policía a la justicia, sin olvidarse de lo que supone la infancia para las personas.

Para Manrique, lo destacable de la obra es que invita al espectador a "mirar el mundo desde otro punto de vista, que aunque sea incómodo, vale mucho la pena".

Reconociendo que se trata de un texto complicado, que exige mucho a los actores, el director ha defendido su vigencia y que vuelva a Barcelona, veinte años después del montaje que dirigió Lluís Pasqual en el Palau de la Agricultura, con un joven Eduard Fernández encarnando a Zucco, un asesino que mata sin motivo.

Precisamente, se trata de hacer llegar este hecho al público y el periplo del personaje, "al margen de si es bueno o malo, sin que se condene de forma inmediata". "Se trata -ha proseguido- de que el público se atreva a acompañarlo en su viaje, aunque mate".

A pesar de su dificultad, Manrique quiere llegar al público más amplio posible, mostrando que "existen prisiones físicas y metafísicas, y la familia y los afectos pueden convertirse en una prisión".

Asimismo, quiere que se vea desde la platea que Zucco "no se sabe por qué mata, lo que convierte la obra en algo grande, ya que en el mundo ocurren muchas cosas catastróficas y no sabemos por qué. Y es que en ocasiones no hay un por qué", ha apostillado.

Pablo Derqui, en el papel de Roberto Zucco, ha dicho que es un "regalo" poder representar a este hombre al límite, fuera de la moral, "que escapa de cualquier patrón, por lo que cada función será diferente".

Lo acompañarán en el escenario Cristina Genebat -que también se ha encargado de la traducción de la obra al catalán y próximamente la trasladará al castellano-, Ivan Benet, Maria Rodríguez, Xavier Boada, Rosa Gàmiz, Xavier Ricart y Oriol Guinart.

En tiempos de crisis y de recortes, cada uno de estos actores deberá ejecutar varios papeles, un reto al que se enfrentan con ganas y que, en palabras de Rosa Gàmiz, "supone una exigencia y un entrenamiento actoral, que no siempre se da".

Sobre la escenografía, Julio Manrique sólo ha querido avanzar que, de la mano de Sebastià Brossa, representará diferentes espacios, acorde con las quince escenas de la obra, que transcurre en una ciudad ficticia francesa, de la que tanto se describe la azotea de una cárcel, una cocina, una comisaría, un parque o un prostíbulo.

La obra, que se estrenará oficialmente el día 21 y estará en cartel hasta el 21 de abril, iniciará después una gira por Cataluña y recalará en el Teatro Español de Madrid en octubre de 2013.

Mostrar comentarios