Kim Kardashian se rinde ante Japón y cambia el nombre de su marca Kimono

  • La empresaria y 'socialité' se ha rendido a las críticas que se han levantado por haber puesto ese nombre una marca de fajas.
Kim Kardashian
Kim Kardashian

Kim Kardashian y la polémica son prácticamente sinónimos. No hay cosa que la empresaria y 'socialité' diga, haga o se ponga que no despierte comentarios y críticas, sea lo que sea. Si bien su última aventura empresarial ha levantado más ampollas que de costumbre, pues la reina de las redes sociales ha llegado a ser acusada de "apropiación cultural".

Hace unos días, Kim lanzó su nueva marca -que se une a las que ya tiene de maquillaje, perfume o ropa- enfocada en esa prenda que es fija todos los días en sus looks, al igual que en los de sus hermanas: las fajas. La 'socialité' ha sacado una línea de estas prendas utilizadas para ceñir la silueta femenina y potenciar las curvas, a la que llamó Kimono, algo que levantó una oleada de críticas en Japón.

El país se indignó con la comparación de Kardashian de las fajas con su mítica prenda, la cual tiene una gran historia detrás y para ellos es un símbolo de su cultura. Por ello, Kim fue acusada de apropiación cultural, y no solo por parte de los ciudadanos. Además, le reprochaban también que pusiera ese nombre a ropa interior cuando el kimono original es una prenda exterior prácticamente sagrada en Japón.

El kimono data del siglo XV y se considera la vestimenta nacional, aunque ahora solo se usa en ocasiones especiales, como ceremonias o celebraciones especiales. Así lo vimos, por ejemplo, en la abdicación del emperador Akihito. De ahí el enfado de la sociedad japonesa, el cual también han expresado algunas autoridades, como el alcalde de Kioto, Daisaku Kadokawa, quien escribió una carta a Kim pidiéndole que reconsiderara la idea de llama Kimono a su marca.

En la misiva, el edil señala que "el kimono es una vestimenta étnica tradicional fomentada en nuestra rica naturaleza e historia con los incansables esfuerzos y estudios de nuestros predecesores. Es una cultura que ha sido apreciada y transmitida con cuidado en nuestra vida". Por ello, Kadokawa le indica que en los últimos años están intentando registrar la prenda como bien intangible de la UNESCO. Además, invita a la 'socialité' a visitar la ciudad para empaparse de esta cultura y tomar conciencia de la importancia que tiene para ellos esta prenda.

Por ello, Kim ha acabado cediendo a la presión y ha quitado el nombre a la marca, sustituyéndolo por Solutionwear. Así lo explicó este lunes en un post en Instagram en el que reconoce que ser empresaria y su propio jefe ha sido "uno de los desafíos más gratificantes" de su vida. Además, señala que siempre está escuchando, aprendiendo y creciendo y que aprecia mucho "la pasión y las variadas perspectivas que las personas me brindan".

"Cuando anuncié el nombre de mi línea de fajas, lo hice con las mejores intenciones en mente. Mis marcas y productos se construyen con la inclusión y la diversidad en su núcleo y, después de una cuidadosa reflexión y consideración,  Solutionwear será su nuevo nombre" ha anunciado la 'celebrity', la cual ha cedido a las presiones de la comunidad japonesa, que han sido superiores a lo que le ha sucedido hasta ahora.

Esta es la primera vez que Kim sucumbe a este tipo de comentarios, pues ya cuando sacó su último perfume, KKW Body, le acusaron de copiar el diseño del frasco a Jean Paul Gaultier y su fragancia Le Male, pues se trata de un busto, si bien en el caso de Kardashian es una réplica del suyo propio.

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