Pedro Ugarte afirma que su novela "El país del dinero" no es "oportunista"

Barcelona, 28 may.- El escritor bilbaíno Pedro Ugarte, ganador del V Premio Logroño de Novela con "El país del dinero", reflexiona en una entrevista con Efe sobre su nueva obra, en la que hay crítica social, una alegoría del boom inmobiliario y dilemas morales, pero advierte que no es un texto "oportunista".

Con una amplía trayectoria, Ugarte pone ahora el foco sobre una ciudad muy parecida a la suya, con una ría que actúa de frontera entre una margen rica y una margen pobre, y tres personajes con vidas entrelazadas, de diferentes estratos sociales y económicos.

Asevera que empezó con esta historia, publicada por Algaida y en la que el dinero es "nuclear", en el año 2006 y estuvo con ella hasta prácticamente el penúltimo día de plazo para poderla presentar al Logroño de Novela, dotado con 45.000 euros.

Se asombra el autor vizcaíno de que el dinero aunque sí se ha utilizado habitualmente en los argumentos de la novela negra, aparece "muy poco como tal en las novelas de otros géneros, cuando es evidente -dice- que lo pone en marcha todo y mediatiza las relaciones entre las personas".

En este caso, el lector podrá seguir las andanzas de Jorge, el narrador de la historia, de un linaje próspero en otro tiempo, pero que ahora sobrevive gracias a ser el empleado de Simón López de Chávarri, un viejo amigo, de uno de los apellidos de más alta alcurnia de la sociedad en la que viven.

En la vida de estos dos personajes se cruzará una chica de melena negra, pelo duro y ensortijado, proveniente de un barrio obrero, ambiciosa y atractiva, de nombre Sharon.

"Hay una parte de crítica social en la obra, pero no se trata de una novela oportunista, sino que se ahonda en las relaciones personales de los personajes, sin obviar que el dinero mediatiza todas las relaciones", asegura.

Con trabajo de campo y el asesoramiento de un amigo ya fallecido sobre la llamada "burbuja inmobiliaria", Ugarte también trata sobre las promociones urbanísticas en lugares como las Islas Canarias y el Levante español, incidiendo en cómo las condiciones económicas influyen en la vida personal de los seres humanos.

El sexo es asimismo protagonista de algunas de las páginas de esta novela de "final bondadoso", en opinión de su propio autor.

"La búsqueda de más y más sexo -afirma- es siempre para llegar al orgasmo, por lo que aquí también me ha servido como metáfora de que con el dinero, por el contrario, nunca hay techo físico, siempre se quiere más y más y más".

Responsable del departamento de prensa de la Universidad del País Vasco, Ugarte ironiza con que "el dinero tiene antipatía por los pobres" y, como ejemplo, cuenta que cuando viste de traje y corbata siempre le tratan de usted y le miran de manera distinta a cuando va en camisa y tejanos.

Finalista del premio Herralde de novela con "Los cuerpos de las nadadoras", Ugarte está a punto de ver adaptada a la gran pantalla su novela "Casi inocentes", dirigida por Papick Lozano e interpretada por Fernando Cayo, Ana Fernández y Jarek Bielski.

Dice que no ha intervenido en el proceso de trasladar la letra al celuloide, aunque sí ha estado en contacto con el equipo de Lozano e incluso fue un día, acompañado por su mujer y sus hijos, a ver el rodaje. "Ahora me han comentado que se presentará en el Festival de Moscú", apostilla.

Nacido en 1963, Ugarte cuenta con una amplia obra narrativa, con títulos como "Los traficantes de palabras", "La isla de Komodo" o "Guerras privadas", y también es colaborador habitual de diferentes medios de comunicación. EFE.