"Yo quiero fumar": las primeras palabras de Joaquin Sabina tras su operación

Joaquín Sabina se encuentra estable en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Ruber Internacional y su situación es "estable" tras haber sido operado a causa de un "hematoma intracraneal"  que sufrió después de su caída durante el concierto que daba junto a Joan Manuel Serrat en el Wizink de Madrid este miércoles. 

Según este parte médico, al que ha tenido acceso Europa Press, Sabina ingresó en este hospital este miércoles 13 de febrero "tras haber sufrido una caída accidental". El cantante presentaba "traumatismo de hombro izquierdo, torácico y craeoencefálico" y ha sido intervenido quirúrgicamente para "realización de evacuación de hematoma intracraneal en hemisferio derecho".

Mira también

Sabina y Serrat confirman que el 22 de mayo retomarán su concierto de Madrid

Uno de los amigos del andaluz, Benjamín Prado, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a todos sus seguidores. Tras visitar al cantautor en el hospital, el escritor ha comentado en 'Más Vale Tarde' que "ya se encuentra mejor. "¿Qué puede hacer Joaquín Sabina según se despierta de una operación?", preguntaba en el programa. "Yo quiero fumar", ha dicho Sabina en el hospital, Prado ha explicado entre risas que el artista se encuentra estable y que se encuentra acompañado de su mujer y sus hijas. 

El percance tuvo lugar alrededor de las 21.00 horas, 30 minutos después de comenzar el concierto, cuando Sabina estaba sobre el escenario pronunciando unas palabras para presentar la mítica canción de 'Mediterráneo'.

En ese momento, tropezó y cayó al foso por lo que se dio un fuerte golpe al precipitarse a la zona que separa el escenario del público. Inmediatamente fue atendido por el personal médico del recinto. Sabina se quejaba de un fuerte dolor en el hombro por lo que fue trasladado hasta un centro hospitalario.

El escritor también ha dicho que "Joaquín quería seguir el concierto", algo que podría haber sido una catástrofe. "Fueron los médicos los que le dijeron que estaba en un estado de euforia" y que no estaba en condiciones de seguir cantando frente a 15.000 personas.