Reyes Mendoza cree que no tenía "más remed" que hacerse subalterno

Córdoba.- El diestro cordobés Enrique Reyes Mendoza, ha decidido, tras ocho años como matador de toros, pasar al escalafón de los toreros de plata, y ha asegurado que su cambio se ha dado "porque no tenía más remedio y por culpa del sistema".

En declaraciones a Efe, el espada ha recalcado que "continuar un año más sin torear no tenía sentido", y ha manifestado que la decisión la tomó en los últimos "quince días", tras ver truncados algunas actuaciones "prometidas" de antemano que "no han salido al final".

En este sentido, Reyes Mendoza ha explicado que la decisión "no tiene vuelta atrás", aunque no descarta torear en "algún festival o algo por el estilo" en un futuro.

En relación a lo motivos que le han llevado a pasar a ser subalterno, el diestro ha confesado que "si estoy donde estoy es porque me lo he buscado", refiriéndose al hecho de no torear lo suficiente en los últimos años, y ha argumentado que se enfrenta a una "nueva situación" a la que debe adaptarse a pesar de "tener oficio".

Con respecto a su trayectoria, el espada ha declinado hacer reproches a nadie, aunque ha recalcado que "la empresa de Córdoba (Taurotoro) no ayuda a los toreros de la tierra" y que el sistema lo ha "perjudicado".

Reyes Mendoza ha explicado cómo hace un par de años, tras salir triunfante del Festival Benéfico del Cáncer, "Taurotoro no tuvo ni la clase de llamarme para la feria o para el propio festival un año después, y más habiendo padecido esta enfermedad".

El espada cordobés ha recordado el día de su alternativa en Córdoba, el 1 de junio de 2002, como "la tarde soñada" tras recibirla de manos de Manuel Benítez "El Cordobés" y con Juan Mora como testigo.

Reyes Mendoza ha señalado que donde "mejor" se ha encontrado a lo largo de su carrera ha sido en las plazas de Las Ventas, en Madrid, y en la Malagueta.

El ex matador, que a partir de ahora compartirá profesión con su hermano Óscar Reyes, también subalterno, realizó su último paseíllo el 13 de septiembre de 2008 en Belmez (Córdoba), donde cortó dos orejas.