Los tres sospechosos fueron arrestados el sábado en una zona montañosa ubicada al norte de la localidad cisjordana de Ramala y, según las autoridades, tenían previsto atacar a sus objetivos utilizando granadas y una metralleta.
El portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri, ha afirmado que "las detenciones son muy peligrosas y reflejan un incremento en la cooperación de seguridad entre estos servicios de seguridad (los de la Autoridad Palestina) y la ocupación --en referencia a Israel-- para intentar acabar con la intifada".
"Hamás condena las prácticas de las fuerzas de seguridad de Cisjordania y hacia responsable a los líderes de la Autoridad Palestina y Al Fatá de estas prácticas anti patrióticas", ha remachado, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, afirmó a finales de marzo que la cooperación a nivel de seguridad con Israel había evitado "una intifada sangrienta", alertando de que el organismo "está al borde del colapso" si la situación actual continúa.
Desde que estalló una escalada de violencia a principios de octubre en la región, alrededor de 190 palestinos han muerto a manos de las fuerzas de Israel, en su mayoría tras cometer ataques. Asimismo, han fallecido 28 israelíes y dos estadounidenses.
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