Bangkok, 26 sep.- Los gobiernos de Australia y Camboya firmaron hoy el controvertido acuerdo que permitirá reubicar en el país asiático a solicitantes de asilo retenidos en centros de detención australianos.
El ministro de Inmigración australiano, Scott Morrison, viajó a Phnom Penh donde firmó el memorando de entendimiento en una breve ceremonia junto al ministro camboyano del Interior, Sar Kheng, y se fue sin hacer declaraciones.
La medida afectará potencialmente a unos mil refugiados del centro que Australia tiene en Nauru, en el Pacífico Sur, de los cuales unos 200 ya han sido reconocidos como refugiados, y que solo serían trasladados a Camboya de forma voluntaria.
Camboya recibirá a cambio unos 40 millones de dólares (31 millones de euros) en los próximos cuatro años adicionales a los 79 millones que Australia ya ha aprobado destinar en ayuda al desarrollo en el país asiático.
Según un comunicado emitido tras la firma, los dos países se comprometen a iniciar a finales de año con pequeños grupos una fase de pruebas de un plan en el que "el número (de refugiados) y el momento de su llegada será determinado por Camboya".
"Los refugiados tendrán la oportunidad y el apoyo para restablecer sus vidas libres de persecución", dijo Morrison en la nota.
Según el comunicado, Australia se hará cargo de los costes, incluido el apoyo inicial a los reubicados y los derivados de garantizar que Camboya "tiene los recursos adecuados para recibir e integrar a los refugiados con éxito".
Morrison defendió la elección de Camboya, país firmante de la convención de la ONU para los Refugiados, pero que en los últimos años ha deportado a varios uigures y montagnard a China y Vietnam, pese a la amenaza de prisión o ejecución que pesaba contra ellos.
Naciones Unidas y varias organizaciones humanitarias han criticado como "inapropiado, inmoral y probablemente ilegal" el acuerdo con Camboya, uno de los países más pobres y corruptos de la región y con un pobre historial en el respeto de los derechos humanos.
"Es inapropiado porque Camboya no está capacitada para recibir estos refugiados, y es inmoral porque estas personas vulnerables son responsabilidad de Australia", dijo el ex jefe del juzgado de Familia de Australia Alastair Nicholson, en un comunicado conjunto de UNICEF, Save the Children y Amnistía Internacional.
"Y a la espera de conocer más detalles, parece ilegal por contravenir las obligaciones humanitarias y con los refugiados de Australia hacia los niños y las familias", añadió Nicholson.
Australia recuperó en 2012 una política para tramitar en países terceros las solicitudes de los inmigrantes que viajan a Australia por la vía marítima en busca de asilo con la aprobación de la apertura de centros de detención en Papúa Nueva Guinea y Nauru.
Los planes de Camberra son reubicar en Camboya a personas detenidas en estos centros a las que conceda asilo y deportar al resto.
Muchos de los inmigrantes han huido de conflictos como los de Afganistán, Darfur, Pakistán, Somalia y Siria, y otros que han escapado de la discriminación o de la condición de apátridas como las minorías rohingya, de Birmania, o Bidun, de la región del Golfo.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios