El daño económico de un rebrote

Cuando el virus golpea dos veces: las reservas se esfuman otra vez en Burela

En las calles de esta localidad gallega se respira intranquilidad. Durante el confinamiento se registraron pocos contagios pero ahora han cerrado bares y las cancelaciones en hoteles se suceden.

Ayuntamiento de Burela y a su izquierda el centro de salud
Ayuntamiento de Burela y a su izquierda el centro de salud
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El coronavirus golpea por segunda vez a Burela, una localidad gallega de 10.000 habitantes que ya recibió un terrible golpe económico cuando el confinamiento obligó a cerrar los negocios de la noche a la mañana. Ahora, cuando los hoteles empezaban a tener reservas, los bares, clientes, y las tiendas cierto trasiego, un rebrote ha provocado una ola de cancelaciones de reservas, comidas o pedidos. Los vecinos perciben la intranquilidad en el ambiente mientras se intenta localizar al paciente cero y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, señala el origen del brote de la comarca de A Mariña, que suma ya 47 casos positivos, en "dos o tres bares de la zona del puerto", en Burela. Desde el Ayuntamiento aseguran que el rebrote está "controlado" y piden que éste no influya a la hora de elegir el destino vacacional. 

Por ahora, los 47 positivos sí están haciendo mella en el turismo. Los dueños de uno de los hoteles de esta localidad atienden a La Información lamentando que la mayoría de las llamadas que reciben sean para cancelar las habitaciones que estaban reservadas "para este fin de semana y el que viene". En el horizonte, agosto, cuando sus clientes de siempre parece que se resisten a faltar a su cita con Burela, aunque sí han llamado en más de una ocasión para saber "cómo está la situación" y "los servicios que vamos a ofrecer". 

Los dueños que dos días antes de que llegue la fecha de entrada se produzca la llamada definitiva para cancelar. Mientras, el hotel sigue abierto para todos esos trabajadores que sí se hospedan de forma habitual pero que todavía no pueden acceder a todos sus servicios porque "continuamos con algunos cerrados, como el comedor". Desde el hotel Palacio de Cristal relatan el mismo escenario. El 2 de julio de 2019 tenían ya colgado el cartel de completo en 2019 y ahora "solo llega al 60%". Chus Rivas, gerente del hotel, cuenta en 'Espejo Público' que "hace bueno", haciendo un guiño al prejuicio del tiempo en Galicia, y que en la zona está el rebrote "controlado gracias al hospital y el centro de salud" y que en la ciudad "está todo vigilado". Una de las frases que más ha escuchado estos días por los interesados en su reserva era preguntar si "el pueblo se había cerrado".

El temor de volver al confinamiento sobrevuela unas calles donde los bureleses aseguran que "lo peor aquí está por llegar" tras pasar el pico de la pandemia con unos datos de contagiados y fallecidos muy bajos y varias semanas con cero casos. Ello propició entre los vecinos cierta relajación que ahora el Ayuntamiento tratan de impedir con nuevas campañas para que se usen las mascarillas. No es la única, según fuente consultadas por este medio. También está teniendo muy buena aceptación otra campaña, "Te ayudamos a confinarte",  con la que se persigue que todas las personas confinadas no salgan de sus casas, ayudándoles con la compra, la farmacia o incluso la basura. "Cada día tenemos reuniones diarias con el centro de salud y el hospital para ir conociendo al detalle los casos", aseguran. En A Mariña el número de confinados ronda los 500.

Burela es una de las localidades de A Mariña con más concentración de jóvenes y hacia ellos principalmente está dirigida la campaña "Burela se pone la mascarilla". Según los vecinos, "es habitual que no se usen porque parece que no ha calado el mensaje de que es obligatorio". Desde el Ayuntamiento reiteran que para paliar el daño económico es vital "que todo el mundo se conciencie". Pero el Consistorio va más allá y pide a sus ciudadanos que recuerden todos los sitios donde han podido estar los días anteriores para así "atajar cuanto antes los posibles contagios". 

Cuando el equipo de rastreadores que trabaja en esta localidad se pone en contacto con jóvenes éstos no concretan con qué personas estuvieron durante una noche de fiesta porque "van de bar en bar y no se acuerdan", asegura una vecina  de Burela. Cree que debería estudiarse un posible retroceso a la Fase 2 y espera que "las elecciones (autonómicas) de la próxima semana no tenga nada que ver con la decisión que se tome desde el Ayuntamiento" para luchar contra el rebrote. Un repunte en los casos que empezó en Xove el pasado día 23 en una comida familiar con motivo del Día de San Antonio, pero que rápidamente alcanzó Burela, donde se sigue buscando a ese paciente cero y donde en la zona del puerto algún pesquero también se ha visto ya afectado.

Precisamente un bar cercano a la cofradía de pescadores es uno de los que ha decidido cerrar ante la aparición de positivos entre sus empleados. No es el único foco: pandillas enteras de jóvenes relacionadas con jugadores de la S.D. Burela y sus contactos están también confinadas, lo que además implica a otras localidades de A Mariña como Xove, Viveiro o Foz.

En palabras del propio Feijóo, "la posibilidad de más brotes es real. En España hay 56 activos y localizados, así que no debemos bajar la guardia y hay que reforzar el sistema de detección y control", insistía el mandatario autonómico, tras matizar que el miércoles se hicieron 500 PCR en la comarca  e insistieron en que "hay que comunicar los síntomas" porque la covid-19 "es una enfermedad de declaración obligatoria, como puede ser la tuberculosis". Y mientras Feijóo se enfrenta a este nuevo brote después de que Galicia fuera de las primeras comunidades autónomas en alcanzar la nueva normalidad su vecina Asturias sigue con cero casos positivos después de que se aclarara el positivo que dio una mujer en uno de sus centros de salud. Se trataría de una vecina de Ribadeo (Lugo)  que cruz el puente que separa ambas comunidades autónomas para ir a hacerse la prueba. 

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