Santander, 25 jun.- El poeta, traductor y ensayista Luis Alberto de Cuenca ha lamentado hoy el fallecimiento de Ana María Matute, una "niña grande" y "eterna" que se ha ido "en plena actividad literaria" y que "había nacido para narrar".
"Ana María Matute es una pérdida irreparable. Siempre, cuando hablamos de gente que se va, hablamos de irreparabilidad, pero en esta ocasión con todas las letras y todos sus sentidos", ha dicho De Cuenca, que participa en las Veladas Poéticas de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.
En declaraciones a Efe, este escritor y filólogo ha considerado que Ana María Matute era "una de las grandes narradoras" de la literatura española contemporánea.
Matute era una mujer "que había nacido para narrar", hasta el punto de que "se diría que era una de aquellas personas que dirige los fuegos de campamentos en los que se cuentan anécdotas, historias y cuentos de todo tipo".
También ha destacado "la capacidad increíble de empatizar con la gente" que tenía la académica de la RAE y Premio Cervantes 2010.
"Era entrañable. No oiréis ninguna opinión discordante en cuanto a la humanidad de Ana María. Era una mujer tan extraordinaria como era escritora, y yo diría que incluso más, porque su humanidad rezumaba por todos sus poros", ha afirmado.
El poeta ha asegurado que conservará un "recuerdo imborrable" de Matute, que "se ha ido en plena actividad", porque ha estado escribiendo hasta el último momento.
Ha añadido que esta escritora "tocó muchos palos", ya que hizo narraciones "muy reflejo de la sociedad del momento", acercándose a una literatura realista o incluso naturalista, pero también destacó en historias "de la imaginación" y fantásticas. EFE
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