EpC.- Chaves, 'abierto al diálogo' con los padres objetores, pero 'respetando' a sentencia del TS

SEVILLA, 12 (EUROPA PRESS) El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, manifestó hoy que está "abierto al diálogo" con las asociaciones de padres opositoras a la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos (EpC), pero con la "condición previa" de "respeto" a la sentencia del Tribunal Supremo (TS) sobre la materia, que está en proceso de redacción. Chaves, que respondió ante el Pleno del Parlamento a una pregunta sobre este asunto formulada por el portavoz del grupo socialista, Manuel Gracía, empezó diciendo que entre las obligaciones de un país democrático y plural, está proporcionar a los jóvenes la impartición en las aulas de una asignatura que enseñe en los valores comunes, como derechos humanos, paz, convivencia y solidaridad, por "encima de las posiciones ideológicas". Tras indicar que la Junta de Andalucía ha desarrollado la Ley Orgánica de Educación, que establece el carácter obligatorio de EpC, de manera que ya se imparte a 100.000 alumnos de tercero de secundaria en esta comunidad, el presidente del Gobierno andaluz manifestó que "nunca" ha entendido la "campaña que se ha desatado contra esa asignatura, al amparo de un inexistente derecho a la objeción de conciencia". Asimismo, señaló que el tema ha quedado "zanjado" por el Tribunal Supremo, que con su fallo "ha respaldado" los planteamientos de la Junta de Andalucía, frente a los recursos judiciales planteados contra la impartición de la asignatura y que "ha dejado claro" que no hay lugar a la objeción de conciencia y que, en consecuencia, no acudir a una clase obligatoria es absentismo. Según el presidente de los andaluces, con EpC "no hay ningún peligro de adoctrinamiento", al tiempo que señaló que los centros escolares escogen y seleccionan los textos de las asignaturas que quieren impartir. Por último, subrayó que no tiene que "nada que objetar" sobre quienes han decidido acudir a los tribunales, pero sí ante aquellos que han intentado "instrumentalizar políticamente" la asignatura y han hecho un uso absolutamente "espurio y partidista para promover una contestación social y una inseguridad en los centros educativos que no se correspondía con la realidad".