Europeas. El partido discapacidad y enfermedades raras consigue 32.000 votos

La agrupación de electores Discapacidad y Enfermedades Raras (DER) ha obtenido más de 32.000 votos en las elecciones al Parlamento Europeo de este domingo, aunque no ha conseguido tener representación en la cámara comunitaria.
La candidatura liderada por Eduard Carreras, un joven de Llagostera (Girona) que padece una distrofia muscular de la que sólo existen entre 10 y 15 casos en toda la UE, ha sumado un total de 32.413 votos, lo que supone el 0,20% de las papeletas válidas.
Carreras explicó a Servimedia durante la campaña electoral que DER se presentaba a los comicios con la intención de llevar a la UE las reivindicaciones por los derechos de las personas con discapacidad o enfermedades raras.
"Es en la UE donde se legisla, donde se corta el bacalao y se reparte todo", señaló, de forma que ahí esperan ejercer más presión por sus reivindicaciones que en administraciones autonómicas o locales.
Subrayó que los dos puntos fuertes del programa son potenciar la investigación en enfermedades raras y eliminar las barreras arquitectónicas, laborales y culturales para la integración de las personas con discapacidades.
Sobre la investigación, DER propone duplicar de inmediato el presupuesto en la investigación de enfermedades raras y que todos los tipos de dolencia cuenten con fondos para ser investigados en un plazo máximo de cinco años. Además, reclama que las empresas con capital suficiente se comprometan a financiar proyectos de este tipo.
En cuanto a las barreras, defiende, por ejemplo, reservar el 10% de las plazas en administraciones y empresas grandes a personas con discapacidad y eximirlas de las cuotas a la Seguridad Social, del coste de las ayudas técnicas en vivienda y vehículo y de la matrícula escolar o universitaria. No obstante, Carreras admitió que el coste de tales medidas para el erario no está cuantificado.
En esta lista electoral cobró forma lo que comenzó poco menos que como una broma. Carreras y un chico de Málaga, Samuel Encinas, que sufría otro tipo de distrofia muscular y que falleció en enero de 2013, hablaban de la posibilidad de llevar a la UE los problemas de la discapacidad y las enfermedades raras, y uno de sus amigos les espetó un día: "Ahí van los eurodiputados".
Pese a la muerte de Encinas, su tío José Luis y el propio Carreras decidieron "echarle un par y seguir adelante". Se presentaron a las elecciones tras conseguir 36.033 firmas, más del doble de las 15.000 que exigía la Junta Electoral Central.