Jóvenes de todo el mundo peregrinan a Javier en vísperas de la JMJ

Pamplona, 13 ago.- Varios miles de jóvenes de todo el mundo han peregrinado hoy hasta Javier para participar, antes de viajar a Madrid para la Jornada Mundial de la Juventud, en una eucaristía en la que, en la cuna de San Francisco de Javier, patrono de las misiones, se ha recordado a los afectados por la hambruna en África.

Emulando a las tradicionales "javieradas", los jóvenes, con banderas de sus países de origen, han recorrido a pie en una soleada mañana los cuatro últimos kilómetros antes de llegar al Castillo, en cuya explanada ha tenido lugar la eucaristía, presidida por el arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez, y concelebrada por diez obispos europeos y americanos que participan en los actos previos a la JMJ organizados por la diócesis navarra.

Los obispos han llegado concretamente de Brasil, Italia, Alemania, Francia, Islandia y Canadá, para acompañar a los cerca de 3.500 peregrinos de todo el mundo que en su viaje hacia Madrid han recalado en Navarra, donde han sido acogidos por familias, parroquias y polideportivos de Pamplona y comarca.

En su homilía, Francisco Pérez ha animado a los jóvenes a ser "no solo los centinelas de la mañana, sino los misioneros de la esperanza y mensajeros de la paz". "Hoy se requiere una nueva evangelización y vosotros sois los mejores evangelizadores de los jóvenes", les ha dicho para llamarles también a ayudar a los que sufren hambre en África.

El arzobispo ha subrayado además que la Jornada Mundial de la Juventud "tiene un solo objetivo: Vivir en Cristo, por Cristo y para Cristo", y ha instado a los jóvenes a cumplirlo para encontrar respuestas a "preguntas que son apremiantes y que vienen forzadas por situaciones que parecen insuperables: dificultades en el estudio, problemas familiares, falta de trabajo, incomprensiones, crisis de todo tipo, falta de recursos ante la situación que pasa la sociedad".

"Las cualidades personales y los bienes materiales -ha dicho Francisco Pérez, parafraseando a Benedicto XVI- no son suficientes para asegurar esa esperanza que el ánimo humano busca constantemente".

"La política, la ciencia, la técnica, la economía o cualquier otro recurso material por sí solos no son suficientes para ofrecer la gran esperanza a la que todos aspiramos", ha insistido el arzobispo, para quien "una de las consecuencias del olvido de Dios o de no contar con él o marginarlo como si fuera un intruso en la vida y en la libertad del hombre, produce desorientación".

Desorientación, ha agregado, "que se muestra en la soledad y en la violencia, en la angustia vital y en la falta de sentido de vivir".

La cita central de Javier, que contará además con una visita al castillo, una comida, un festival internacional y con concierto Gospel, tuvo ayer su preludio en un acto mariano que contó con la presencia de la imagen de Santa María La Real, que no había salido de la catedral pamplonesa desde 1946.