El policía franquista, Antonio González Pachecho, conocido como Billy el Niño, acusado de torturas y reclamado por la justicia argentina, ha fallecido a primera hora de esta mañana por coronavirus. Atrás deja un largo historial de condecoraciones como medallas y felicitaciones que a principios de este año el Congreso aprobó descalificar.
Billy el Niño ingresó en el Cuerpo General de Policía y llegó a ser número dos del comisario Roberto Conesa en la Brigada Político-Social. Se terminaría haciendo conocido por las palizas, malos tratos y torturas que infligía a los detenidos durante los interrogatorios.
Desde entonces, ha llegado a acumular hasta cuatro medallas y numerosos reconocimientos públicos, que se traducían normalmente en premios en metálico. En total, según publicó en febrero eldiario.es, figuran 18 felicitaciones públicas por represión comunista y estudiantil, así como por la represión de los movimientos antifranquistas.
El medallero
Fue en 1972 cuando se le entregó la primera medalla, junto a numerosos policías y guardias civiles. ¿El motivo de esta primera condecoración? La conmemoración del 18 de julio, fecha de inicio de la Guerra Civil.
La segunda medalla llegaría cinco años más tarde, en 1977. Con distintivo de plata, se la dio el entonces Gobierno de Adolfo Suárez el 13 de junio. Esta vez la justificación sería la liberación del presidente del Consejo de Estado, Antonio María de Oriol, y el teniente general Emilio Villaescusa, secuestrado por los GRAPO, a finales del 76 y principios del 77.
La tercera medalla se la entregó el Ministerio de Interior en 1980 por un "perfecto y admirable trabajo de vigilancia policial". La última llegaría en 1982, cuando se le entregó a toda la Brigada de información a la que pertenecía Billy el Niño.
Cada vez que Billy el Niño recibía una de estas condecoraciones aumentaba su pensión, hasta el punto de llegar a incrementarla en un 50%. Y esto es, precisamente, lo que el Gobierno estaba tratando de evitar justo antes del inicio de la pandemia. Tanto es así que el pasado 11 de febrero, Adriana Lastra lo dijo bien claro: "Vamos a quitarle todas las condecoraciones a Billy el Niño". Finalmente, ha fallecido con sus medallas intactas, sus prestaciones y sin rendir cuentas por sus torturas en la época franquista.
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