En Valencia

Un niño de 4 años salva a su madre enviando audios al Whatsapp familiar

Cuando el pequeño vio que su madre de cayó al suelo y no se levantaba cogió el móvil y empezó a mandarles mensajes. Los familiares llamaban y al no descolgar avisaron a los servicios de emergencia

Coche Policía Nacional
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POLICÍA NACIONAL

Con tan solo 4 años un niño ha salvado la vida a su madre que, embarazada, cayó de repente al suelo. El pequeño no dudó en coger el teléfono móvil y empezar a enviar palabras y audios al grupo de Whatsapp de la familia, lo que alertó porque empezaron a llamar y vieron que ella no respondía, solicitando así ayuda médica. Los primeros en llegar al piso fueron agentes de la policía que al escuchar al niño llorar acabaron echando la puerta abajo, encontrándose a la mujer en el suelo después de que la hubiera dado un derrame cerebral. 

Así lo ha señalado a EFE el director general de Emergencias de la Agencia Valencia de Seguridad y Respuesta las Emergencias de la Generalitat, Jorge Suárez, quien ha destacado la importancia de dar a conocer el número 112 entre los menores. Según publica el diario Levante-EMV, el menor salvó la vida de su madre embarazada, quien había sufrido accidente cardiovascular y se encontraba inconsciente en su domicilio, al activarse la ayuda médica tras enviar a su familia audios de Whatsapp. Suárez ha explicado que los bomberos, tras derribar la puerta, comprobaron que había una persona que necesitaba una respuesta sanitaria urgente, al tratarse, además, de una mujer embarazada.

Ha destacado que en este caso el menor, a pesar de su corta edad, tuvo la capacidad de alertar, a través de un grupo de Whatsapp, a otros familiares, pero ha señalado que otros menores han podido llamar 112 porque es un número fácil de memorizar. En este sentido, ha insistido en la importancia de difundir y dar a conocer el teléfono de emergencias 112 entre los más pequeños, ya que gracias a él se puede salvar una vida.

Por su parte, Paola, una vecina del edificio donde ocurrieron los hechos, ha afirmado que se encontraban en casa cuando oyeron la llegada primero de la Policía, y después de los bomberos y de los servicios sanitarios. Asimismo, escucharon como algunas personas hablaban con el menor para que abriera la puerta, y cómo finalmente tuvieron que derribarla. También vieron cómo el pequeño se quedaba con unos familiares mientras a la mujer se la llevaban al hospital en ambulancia.

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