Suárez:Los magos no podemos hacer nada para que la política recupere su magia

  • El director de Magialdia, José Ángel Suárez, el festival de magia más antiguo de España, que se celebra en Vitoria, se refiere en una entrevista con EFE a la pérdida de credibilidad de la política y afirma que los magos no pueden hacer nada para que ésta recupere la magia perdida.

Vitoria, 31 ago.- El director de Magialdia, José Ángel Suárez, el festival de magia más antiguo de España, que se celebra en Vitoria, se refiere en una entrevista con EFE a la pérdida de credibilidad de la política y afirma que los magos no pueden hacer nada para que ésta recupere la magia perdida.

Suárez es presidente de la Asociación de Ilusionistas de Álava y uno de los responsables de que Magialdia cumpla en septiembre su 25 aniversario pese a los recortes y a la crisis.

El cartel de artistas que visitarán Vitoria del 16 al 22 de septiembre promete actuaciones inéditas en España como las de Jean Philippe Loupie (Francia), Matt Hennem (Inglaterra), Patrick Lehnen (Alemania), Phil Keller (Francia), Pierric (Suiza), Vlad (Ucrania), Zuk et Silhouette (Francia) o Lukas Lee (Corea).

Para llegar a preparar un programa con los mejores exponentes de la magia en el mundo, Suárez ha tenido que viajar y ver muchos espectáculos pero también se ha dejado ayudar por amigos de la profesión que "espían" a otros colegas por medio mundo y luego se lo cuentan.

De todas formas, sin salir de España ya se puede conocer a los mejores magos porque "es uno de los países con más festivales de magia de Europa" y es "la cuna de la cartomagia, la magia de cerca", indica.

De hecho, el popular y televisivo Juan Tamariz, "es una de las grandes referencias mundiales vivas de la magia", asegura.

En Magialdia, los mejores magos del mundo vienen a Vitoria y "cuentan sus secretos, lo que investigan, lo que descubren". No lo revelan al gran público sino a los profesionales y aficionados que asisten a las jornadas de trabajo especializadas.

"Muchos juegos de magia que se siguen haciendo hoy en día son clásicos, de la época de Harry Houdini y mucho más antiguos, lo que cambia es la presentación de los mismos", afirma.

"La magia es dejarse ilusionar por algo que es imposible" y para llegar a ello, el artista debe ser hábil, controlar la atención del público, su memoria reciente y "un montón de cosas más" que hacen que un juego de magia sea visto como "un milagro" porque al espectador le falta información sobre lo que ha pasado.

Algunos políticos utilizan técnicas similares para obnubilar al público en sus discursos, confiesa entre risas, aunque recuerda que un buen juego de magia, que no truco, requiere mucho estudio e incluso años de desarrollo y preparación.

El término truco de magia, tan extendido entre los profanos, no se debería emplear de forma genérica porque se refiere a una más de las herramientas que se usan en esta disciplina artística, aclara.

Volviendo a la política y a la crisis de credibilidad que atraviesa, Suárez recuerda que los magos no pueden hacer nada para que recupere la magia que algún día tuvo.

"La política sólo ha tenido magia después de morirse Franco, que era cuando nadie la conocía, pero en eso no pueden hacer nada los magos, no podemos dar golpes de Estado", exclama.

Si como mago pudiera hacer desaparecer algo que preocupa a la sociedad, dice que haría un paquete muy grande en el que metería todo aquello que impide que la gente viva tranquila y feliz pero los magos, confiesa, no lo son hasta ese punto.

De la entrevista se deduce que no existe un juego perfecto o una ilusión perfecta y Suárez matiza que "todo depende del momento y del estado de ánimo del que lo ve".

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