"Turquía ha recibido a 2,7 millones de sirios y también a 150.000 iraquíes. Estoy seguro de que nuestros amigos peruanos también apoyarán la lucha contra estos problemas", agregó Erdogan al finalizar su primer día de visita a Perú.
"Como ya saben, en la región que se encuentra Turquía se está atravesando un mal momento (...) 400.000 personas han fallecido debido a actuaciones del régimen de Daesh (EI) y otras bandas y grupos. Muchas ciudades, bibliotecas, zonas de culto han sido destrozadas", comentó el gobernante turco, flanqueado por su par peruano Ollanta Humala en Palacio de Gobierno de Lima.
Erdogan mencionó que 12 millones de personas debieron desplazarse de sus hogares a raíz del conflicto civil en Siria y a la lucha contra el EI en Irak.
Albergar desplazados le ha costado a Turquía unos 9.000 millones de dólares, dijo Erdogan el lunes en Chile.
Turquía, considerada durante mucho tiempo complaciente con los yihadistas sirios, se adhirió en agosto pasado a la coalición internacional antiyihadista liderada por Estados Unidos.
En enero, un atentado atribuido al EI en Estambul causó la muerte de 10 turistas alemanes y dejó 17 heridos, entre ellos una peruana.
"Quiero comentar lo tristes que nos sentimos porque un peruano fue afectado durante el atentado en Estambul. Actualmente se encuentra bien (...) Como país continuaremos luchando contra estos atentados", agregó Erdogan.
Paralelamente Turquía enfrenta una guerra interna luego de que, tras dos años de alto al fuego, se reanudó a mediados de 2015 un conflicto con rebeldes kurdos, que acabó con las negociaciones de paz que habían empezado en 2012 para poner fin a una rebelión que ha dejado más de 40.000 muertos desde 1984.
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