Domenech, o cómo el zodiaco influye en la selección francesa

Cuando los padres de Raymond Domenech (Lyon, 24 de enero de 1952) decidieron abandonar Cataluña y emigrar a Francia durante la dictadura franquista, no podían imaginar que su hijo se terminaría convirtiendo en uno de los personajes más reconocidos en el país galo. Tras una extensa carrera como futbolista que le llevó por equipos como el Olympique de Lyon, París Saint Germain o Girondins, siguió el camino lógico y se hizo entrenador. Pasó por dos clubes (Mulhouse y Lyon), para posteriormente hacerse cargo durante una década (1993-2004) de la Selección Sub'20 gala. De entre los centenares de jugadores a los que formó, había un tal Zinedine Zidane…

Tras el pésimo papel de la selección francesa en la Eurocopa de Portugal (eliminada en cuartos por Grecia, a la postre campeona), la federación gala optó por él para sustituir a Santini, en una decisión que conllevó numerosas críticas entre los medios del país vecino.

Domenech es una persona peculiar en un mundo tan estereotipado como es el fútbol. De inquietudes culturales muy marcadas, no ha dudado en intentar trasladarlas a los jugadores que ha tenido bajo su mando, llevándoles a museos o teatros. Una de sus pasiones es la astrología, y con esa afición llegó el escándalo.

En su cargo de seleccionador ha tomado algunas decisiones polémicas e impopulares, y los medios y aficionados no han dudado en achacarlas al zodiaco. Domenech ha dejado fuera de sus convocatorias a algunos de los mejores futbolistas franceses de la última década como Pires, Giuly, Micoud o Trezeguet, cuando estaban en un gran estado de forma. Y los supuestos motivos han sido revelados por algunos de los afectados.

Domenech no quiere 'escorpios' entre sus jugadores porque "siempre terminan matándose entre ellos". Pirés es de este signo. Tampoco ve con buenos ojos a los futbolistas que nacieron bajo el signo del león, ya que son muy temperamentales. Micoud es Leo, y en una ocasión, al ser preguntado por su ausencia en el combinado nacional francés pese a estar realizando una gran temporada con el Werder Bremen, no dudó en responder: "Quizás no estoy porque mi signo del zodiaco es Leo y ya hay demasiados en el equipo".

El actual seleccionador galo reconoce su afición por la astrología, pero niega que le afecte en la toma decisiones en su trabajo. "He hecho cartas astrales para conocer la personalidad de los futbolistas y poder comunicarme con ellos, pero nunca para hacer una alineación", ha afirmado.