Londres.- El Manchester United invocará este miércoles el espíritu de las grandes noches de Old Trafford para superar la eliminatoria de cuartos de la Liga de Campeones ante el Bayern de Munich, en un partido ante el que Alex Ferguson se guarda en la manga el "as" de Wayne Rooney, lesionado en la ida.
La derrota en la ida en el Allianz Arena (2-1) levantó ampollas en los "red devils", que entregaron en el descuento un partido que habían encarrilado en el minuto 2 con gol de Rooney y, lo que es peor, en el que perdieron por lesión a su goleador.
El "efecto Rooney" se notó de inmediato y el United cedió el liderazgo en la Premier tras caer derrotado en casa ante el Chelsea (1-2), en un partido en el que se notó la falta del delantero, el máximo goleador europeo con 34 goles en lo que va de temporada.
Rooney no está recuperado al cien por cien de su lesión de ligamentos en el tobillo derecho, pero no se descarta que juegue por la importancia del choque ante los alemanes, que podría clasificar al United para sus cuartas semifinales consecutivas de la Champions.
El delantero no participó en el entrenamiento de hoy, por lo menos en los quince minutos que se permite la presencia de la prensa en la sesión técnica previa al partido, y la prensa deportiva del Reino Unido especula hoy con que Ferguson decidirá en el último momento si incluye o no a Rooney en la convocatoria.
La buena noticia para el técnico escocés es que previsiblemente podrá contar con el irlandés John O'Shea, que no ha jugado desde que se lesionó en noviembre en el partido de desempate frente a Francia de clasificación para el Mundial de Sudáfrica.
El partido, un auténtico clásico entre dos equipos que suman siete títulos continentales (cuatro el Bayern y tres el Manchester), será de máxima tensión, sobre todo para los de casa, que llevan una semana desastrosa tras sus derrotas ante Bayern y Chelsea.
El defensa Nemanja Vidic reconoció que el resultado del miércoles dependerá mucho de la fortaleza mental de su equipo, de que sea capaz de vencer la presión que supone una eventual eliminatoria de la Champions y un final de Premier a rebufo del Chelsea.
"Creo y espero que encontraremos la energía que necesitamos. Necesitamos redescubrir esa mentalidad ganadora. Tenemos que hacer piña y jugar como un equipo. Los últimos partidos han sido difíciles y con una gran carga emocional", dijo Vidic a un canal de radio.
Vidic admitió también que lo preocupante no son sólo los resultados, sino la manera en la que jugaron", y expresó su confianza en que el equipo saque "el coraje" que demostró contra el Chelsea cuando se vio dos goles por debajo en el marcador.
Por el contrario, desde el partido de ida la semana pasada el destino del Bayern parece haber dado un giro radical y si hace ocho días se hablaba de una minicrisis bávara ahora la situación de los dirigidos por Louis Van Gaal parece ideal desde muchos puntos de vista.
El viraje lo dio el equipo justo en la ida contra el Manchester. Esa victoria fue el comienzo del regreso del Bayern a la senda del éxito, que siguió con el triunfo en la Bundesliga ante el Schalke, que le permitió recuperar el liderato.
Ahora, se trata de cerrar el ciclo logrando la clasificación a las semifinales de la Liga de Campeones.
Hay una estadística que habla a favor del Bayern y es que el club no ha perdido nunca en Old Trafford y un empate le daría a los bávaros el pase a la siguiente ronda.
En lo personal, el departamento médico del Bayern trabaja a marchas forzadas para lograr la recuperación del holandés Arjen Robben y del defensa belga Daniel Van Buyten.
"Tengo la esperanza de que pueda jugar, pero hay que esperar", dijo Van Gaal, a propósito de Robben.
Según Van Gaal, Robben no está propiamente lesionado sino que tiene síntomas de fatiga en la musculatura mientras que Van Buyten se está recuperando de un golpe en la rodilla que sufrió en el duelo contra el Schalke.
Van Buyten y Robben se entrenaron el lunes en solitario -cuando el resto del equipo tuvo día libre- y viajaron con el equipo. Sólo mañana se decidirá si estarán en el partido.
Quien con seguridad si estará mañana en Old Trafford es Bastian Schweinsteiger, que se perdió por sanción el partido de ida.
Si Van Buyten puede jugar, Holger Badstuber volvería a su posición de lateral izquierdo. Si el belga causa baja, Badstuber jugaría de central y las mejores cartas para aparecer como lateral izquierdo las tendría Diego Contento.
En el lugar de Robben, en caso de que el holandés no pudiese jugar, estaría, como en el partido de ida, el turco Hamid Altintop.
Alineaciones probables:
Manchester United: Van der Sar; Neville, Vidic, Ferdinand, Evra; Fletcher, Carrick; Valencia, Park, Nani; Berbatov
Bayern Munich: Butt; Lahm, Van Buyten o Contento, Demichelis, Badstuber; Schweinsteiger, Van Bommel; Robben o Altintop, Müller, Ribery; y Olic.
Árbitro: Nicola Rizzoli (ITA)
Estadio: Old Trafford, Manchester.
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