25 millones de japoneses se quedaron despiertos hasta tarde para ver a su equipo vencer a Samoa en su tercer partido de la Copa del Mundo de Rugby, batiendo récords de audiencia que demuestran el flechazo repentino de los nipones por el deporte del balón ovalado.
Japón ganó por 26-5 el sábado, lo que significa que la selección que era considerada como la cenicienta al principio del campeonato, todavía tienen posibilidades de clasificarse para los cuartos de final por primera vez en la historia del Mundial.
El conjunto asiático tiene que vencer a los Estados Unidos el domingo y esperar otros resultados en el grupo B para lograr la hazaña, como por ejemplo una victoria de Samoa sobre Escocia el sábado.
El encuentro entre Japón y Samoa fue visto por aproximadamente una quinta parte de los 128 millones de personas que viven en Japón, dando como resultado un 64% de share. Se trata de la audiencia nacional más alta de la historia en lo que concierne al rugby.
El anterior récord de 20, 7 millones se había establecido en 2007, cuando el canal francés TF1 retransmitió la derrota de Francia en París en la semifinal de la Copa del Mundo.
"Este es un resultado significativo para el rugby en Japón. Demuestra que la población en general aprecia el deporte y los espectaculares rendimientos de su equipo nacional en las últimas semanas", afirmó Brett Gosper, director ejecutivo del Rugby Mundial.
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