El técnico del Racing cree que la incertidumbre por la huelga y el parón no pueden ser una disculpa

Santander.- Marcelino García Toral, entrenador del Racing de Santander, ha opinado hoy que el parón por los partidos de la selección española y la incertidumbre suscitada ante la posibilidad de que hubiese huelga este fin de semana, no se pueden utilizarse como "disculpas" ante un posible mal resultado frente al Espanyol.

El técnico asturiano, en conferencia de prensa, además de señalar que el calendario ya se conocía, ha subrayado que durante esta semana no ha modificado su forma de trabajar y se ha entrenado con la idea de que no iba a haber huelga.

Para Marcelino que finalmente se juegue este fin de semana es una buena noticia "más por el bien de la competición" y ha afirmado que hubiese acatado con la misma actitud cualquier decisión que se hubiera adoptado.

Preguntado por el rival del domingo, Marcelino ha opinado que, a estas alturas del campeonato, el Espanyol "ha perdido fortaleza atrás al traspasar dos jugadores (Víctor Ruiz y Dídac Vilá) en más de 12 millones de euros" y haberse lesionado Forlín.

Sin embargo, Marcelino ha alertado del "gran potencial ofensivo" del Espanyol, un equipo que cuenta con delanteros "rápidos y dinámicos" y que ha recuperado al argentino Osvaldo, para Marcelino un futbolistas que durante la primera vuelta "estaba siendo uno de los mejores delanteros de la Liga".

Las lesiones y los traspasos son las dos circunstancias que, a juicio de Marcelino, han frenado algo al Espanyol, al impedir que mantuviesen el mismo once habitual de su fulgurante primera vuelta.

Marcelino ha señalado que el Racing viaja a Barcelona con la intención de sumar una victoria que "sería un paso importante" para alcanzar la barrera de los 42 puntos que el técnico asturiano sigue considerando suficiente para mantener la categoría.

"Tenemos que pensar que cada partido es una final", apunta Marcelino, con la seguridad de que su equipo mantendrá la misma ilusión y ganas de las últimas jornadas.

El técnico ha matizado que no cree que los bajones que ha tenido su equipo en la recta final de algunos partidos se deba únicamente a aspectos físicos. "Es la suma de varias circunstancias", ha opinado el técnico citando entre ellas la ansiedad, la importancia de los puntos y el ritmo de juego de los minutos anteriores.

En cuanto al estado de los jugadores que han llegado de jugar con sus respectivas selecciones, Marcelino ha declarado que el argelino Mehdi Lacen y el sueco Markus Rosenberg no tendrán "ningún problema" para poder jugar el domingo.

Y tampoco cree que lo tendrá Giovani Dos Santos, aunque sea el que "jugó más minutos y en un continente diferente", aspecto este último al que ha aludido Marcelino por el cambio horario.

Al ser preguntado por el griego Alexandros Tziolis, centrocampista que se rompió la tibia a principios de octubre y que ha declarado que ya se encuentra en condiciones de reaparecer, Marcelino ha discrepado con un escueto: "Yo le veo que no".