Pedro Pacheco, el alcalde de "Jerez Ciudad del Deporte"

Jerez de la Frontera (Cádiz), 19 sep.- "Jerez, Ciudad del Deporte" fue un eslogan de su ayuntamiento en la década de los ochenta siendo entonces alcalde Pedro Pacheco, condenado hoy por el Tribunal Supremo a 5 años y seis meses de cárcel por delitos de falsedad documental, prevaricación y malversación.

Pedro Pacheco, alcalde de Jerez desde 1979 a 2003, convivió con las críticas permanentes de la oposición al considerar que la ciudad no podía soportar económicamente determinadas iniciativas de aquel "Jerez, Ciudad del Deporte".

El ahora condenado Pacheco impulsó la construcción del Circuito de Velocidad de Jerez, inaugurado en 1985, el segundo trazado permanente de motor de España, tras el madrileño Jarama.

Con Pacheco como presidente de Cirjesa, la sociedad que gestiona el Circuito de Jerez, España recuperó un Gran Premio de Fórmula Uno, en 1986, después de cinco años sin celebrarse. En siete ocasiones, cinco de ellas consecutivas desde 1986 a 1990, el Circuito de Jerez albergó un GP de F-1.

Desde 1987 hasta la actualidad, de manera interrumpida, en el Circuito de Jerez se disputa el Gran Premio de España de Motociclismo.

Sin embargo, la 'joya' de la corona del deporte de Jerez, el Circuito de Velocidad, entraba en 2011 en concurso de acreedores. En el pasado marzo lograba salir de la situación concursada con la firma del pago de la deuda de 32,3 millones de euros.

Con Pacheco en la alcaldía también se construyó en 1988 el estadio Chapín, uno de los pioneros en tener pistas de atletismo en España. Chapín fue inaugurado aquel año por el Real Madrid, en un partido contra el Xerez CD.

En este estadio organizó el Ayuntamiento de Jerez durante cinco años consecutivos el Mitin de Atletismo Ciudad de Jerez, hasta 1992, con la presencia de importantes figuras, como el estadounidense Carl Lewis, el ruso Sergei Bubka o el colombiano Javier Sotomayor.

Pedro Pacheco compartió, desde 1996 a 1998, el cargo de alcalde con la presidencia del Xerez CD. Prometió públicamente un vehículo de la marca Mercedes a cada miembro de la plantilla si el equipo ascendía a Segunda División A, lo que se logró en junio de 1997. Años después, una sentencia judicial obligó a indemnizar a seis futbolistas a los que se excluyó del reparto inicial.

En 1998, siendo el Ayuntamiento de Jerez accionista mayoritario del Xerez CD, le fue traspasado el paquete principal a Luis Oliver Albesa, vinculado posteriormente al Real Betis Balompié.

En 2001, Pacheco daba un plazo de 48 horas a Oliver para dimitir de la presidencia del club xerecista. Al negarse éste, el Ayuntamiento decidió no ceder las instalaciones de Chapín para jugar los partidos de la temporada 2000/2001. El Xerez CD jugó toda la primera vuelta en Sanlúcar de Barrameda con Oliver en la presidencia y el alemán Bernd Schuster como entrenador.

Cerca del final de la etapa de Pacheco como alcalde de Jerez, la ciudad organizó los IV Juegos Ecuestres Mundiales, en 2002. Debido a este acontecimiento deportivo, el estadio Chapín fue reformado y se construyó un Palacio de Deportes en las cercanías. La deuda que se conoció posteriormente rondaba los 12 millones de euros.

Durante la etapa de Pedro Pacheco como alcalde de Jerez, en Chapín se disputó el único partido internacional de la selección española absoluta que ha tenido la ciudad, un amistoso en 1995 frente a Alemania.

En aquellos años, la Vuelta Ciclista a España partió de Jerez en 1979, 1984 y 1992. En 1986, Jerez llegó a ser final de la Vuelta, con el triunfo del gallego Álvaro Pino.

También se disputó en 1993 un torneo amistoso de baloncesto que contó con la presencia del Real Madrid de Arvidas Sabonis y el Cibona de Zagreb de Aleksandar Petrovic.

En 1987, el pabellón Ruiz-Mateos de Jerez acogía la fase final del Campeonato de Europa femenino de baloncesto, junto a la vecina localidad de El Puerto de Santa María.

En aquel "Jerez, Ciudad del Deporte" auspiciado por Pacheco, en 1990 se disputaba la Copa del Mundo de voleibol femenino, junto a las otras sedes de El Puerto y Sanlúcar de Barrameda, otro acontecimiento que puso en el escaparate a la ciudad.