Ponzio-Lucho, una pareja con muchos kilómetros para escoltar a Kranevitter

River, que este sábado viajó de Tokio a Osaka, conocerá a su rival el domingo, en el enfrentamiento de cuartos entre el Sanfrecce Hiroshima, equipo local, y el Mazembe, campeón africano.

La presencia de Ponzio, indiscutible desde su regreso a River en 2012, era una apuesta segura mientras que la posible entrada de González, que volvió a Los Millonarios en junio, fue la sorpresa del técnico Marcelo Gallardo en el entrenamiento del viernes en el Akitsu Soccer, en las afueras de Tokio.

El sacrificado en el equipo titular, en el caso de que el entrenador finalmente se decante por esta variante, sería Leonardo Pisculichi.

Kranevitter y el uruguayo Carlos Sánchez completarían la línea de centrocampistas. Precisamente ambos jugadores abandonarán Los Millonarios tras el Mundial de Clubes.

El primero, una de las grandes revelaciones del fútbol argentino, se incorporará al Atlético de Madrid, donde le espera un papel importante en el equipo dirigido por Diego Simeone.

Sánchez, fundamental en los dos últimos años de éxitos de River, decidió aceptar la propuesta del Monterrey mexicano.

En la dirección contraria, Lucho regresó hace seis meses al club en el que brilló entre 2002 y 2005, cuando inició una década fuera de Argentina, en la que lideró al Oporto (2005-2009 y 2012-2014), pasó por el Marsella (2012-2014) y terminó en el Al Rayyan de Catar.

Internacional con Argentina en 45 ocasiones (7 goles) 'El Comandante' evidenció en este semestre la poca exigencia física de su última etapa.

"Personalmente estoy pagando las consecuencias de haber jugado un año y medio en Catar. Me sirvió económicamente, pero futbolísticamente todavía no pude recuperarme", reconoció a mediados de noviembre.

Convertido en un revulsivo habitual para Gallardo, sus últimas actuaciones ante Huracán en la Recopa Sudamericana parecen haberle otorgado una oportunidad en el once.

"En el Mundial de Clubes hay que estar al 100% para no pasarlo mal. La edad pesa", explicó con franqueza.

En la medular le acompañará un referente para la afición como Ponzio, 8 veces internacional con la Albiceleste, que inició su segunda etapa con River en 2012 tras haber jugado en el curso 2007-2008.

"Nos tocó a todos un poco de bajón que se notó, y es algo que está a la altura de estas circunstancias. No hay que salir de eso de ganar, que es lo que nos hace feliz. Hay que volver a la dinámica de ganar", señaló el antiguo medio del Zaragoza, refiriéndose a la crisis de resultados de River en los últimos meses.

Pero el aliciente de jugar el primer Mundial de Clubes para el histórico club de Buenos Aires y contar con unos 15.000 aficionados que están viajando a Japón para animar parece suficiente para reactivar al grupo.

"Hay muchos jugadores que hicieron una gran carrera y nunca tuvieron la posibilidad de jugar un Mundial de Clubes. Es algo fenomenal para nosotros, sabiendo que no vamos a jugar mucho tiempo más", señaló Lucho en una entrevista con la página de la FIFA, consciente del reto que afrontan.

pm/iga