Sabine Lisicki: un brazo poderoso en un cuerpo frágil

La tenista alemana Sabine Lisicki entró este martes en los libros de los récords del tenis femenino después de firmar en su partido de primera ronda del torneo de Stanford (Estados Unidos) el saque más rápido en la historia del circuito de la WTA. Una potente derecha que no le sirvió para ganar su choque contra la serbia Ana Ivanovic.

La germana, finalista en 2013 en Wimbledon y actual número 29 del ránking, sacó a una velocidad de 211 kilómetros por hora, con 40-30 y 5-5 en el marcador de un partido que acabó perdiendo por 7-6(2) y 6-1. En el torneo de Standford sacó a 201 kilómetros por hora. Gracias a su potente disparo, Lisicki fue la segunda jugadora con más aces el año pasado.

Vea los saques más potentes de la historia del tenis.

Con la marca de este año, la jugadora alemana superó el anterior récord que poseía la estadounidense Venus Williams, que sacó a más de 207 km/h en el año 2007. Curiosamente, cuatro de las 10 mejores marcas de servicio en el tenis femenino están en posesión de alemanas.

Tatjana Maria sacó a 199,6 kilómetros por hora US open en el 2012. Anna-Lena Groenefeld, en 2009, superó los 200 km/h en Indian Wells. La tercera alemana en tener un saque prodigioso es Julia Goerges, que sacó a 203 km/h en el Roland Garros hace dos años.

Lisicki nació el 22 septiembre de 1989. Actualmente vive Bradenton, Florida, aunque nació en la provincia Troisdorf (Alemania). Es una jugadora de gran envergadura: mide 1.78 y pesa 70 kg. Su balance de victoria y derrotas en individuales es de 249 - 160, mientras que en dobles es de 64 - 38.

A lo largo de su carrera ha ganado 3 títulos de Individuales WTA, tres títulos en dobles WTA y dos de Individuales del circuito Femenino de la ITF.

El año pasado, eliminó a la número uno del mundo y a la cinco veces campeona de Wimblendon Serena Williams en octavos de final, pero cayó derrotada en la final ante la tenista francesa Marion Bartoli, por un contundente 6-1 y 6-4 en 1 hora y 21 minutos. La francesa cerró un torneo casi perfecto en el que no ha cedido un solo set, un logro que solo cinco jugadoras habían firmado hasta ahora durante la Era Open.

En el 2012, Sabine Lisicki, (cabeza de serie número 15)eliminó a la número 1 mundial María Sharapova, imponiéndose por un 6-4, 6-3. La rusa venía de triunfar en el Abierto de Francia y buscaba ser la primera tenista que gana ese torneo y Wimbledon en un mismo año desde que Serena Williams lo hizo en el 2002.

Poco antes del comienzo del torneo de tenis en Wimbledon de este año, la alemana comunicó su desvinculación de la entrenadora y ex número del mundial Martina Hingis. La extenista entrenaba a la alemana desde principios de año, pero prescindió de sus servicios antes de que la edición de Wimblendon de 2014 diera comienzo.

"Ella quería volver a jugar dobles después de que ganáramos el título de dobles en Miami", explicó Lisicki, quien también admitió que la diferencia "de conceptos" jugó un papel en la decisión.

Después del cambio, volvió a jugar nuevamente bajo las órdenes de su padre, Richard. Con Hingis disputó cuatro torneos de dobles en 2014 y ganó el título de Miami, pero no consiguió pasar de la segunda ronda en otros tres.

En marzo de 2010 marzo sufrió una lesión en su tobillo izquierdo durante el tercer set de su partido de segunda ronda en Indian Wells, lo que la obligó a retirarse del torneo. La lesión fue tan grave que Sabine estuvo alejada de las canchas durante cinco meses.

Lisicki comentó que su pasión por el tenis fue fundamental para volver a las pistas. Igual de reparador fue la lectura de la biografía de Hermann Maier, un esquiador austriaco que estuvo a punto de perder su pierna después de un accidente en motocicleta. Finalmente, el esquiador se recuperó y volvió a lo grande: campeón del mundo y medallista olímpico en los Juegos Olímpicos de Invierno.

La lesión la relegó hasta el puesto 179 del ránking mundial. Actualmente es la número 29 el mundo. Su posición más alta en el ránking la alcanzó el 21 de mayo en el 2012, cuando se colocó en la décima segunda posición. Con 20 años, en el 2008, se alzó hasta el puesto 53 y la siguiente temporada, hasta el puesto 23 del ránking mundial.

Es fuerte, tiene un buen servicio, es joven y ha demostrado que tiene talento. Se considera una persona feliz. Destaca de sí misma su capacidad de hacer reír a los demás. No obstante, también la hemos visto llorar después de ser sacada en camilla por calambres de Roland Garros. Su principal lastre es la fragilidad de su cuerpo. Veremos si las lesiones la respetan.