Argentino Pérez Esquivel y Obama, dos nobel de la Paz buscan hacer las paces

El nobel argentino Adolfo Pérez Esquivel espera que el mandatario estadounidense, Barack Obama, admita el cuestionado papel de Washington en la dictadura argentina (1976-1983) pero también en las otras que golpearon a América Latina cuando visite Buenos Aires esta semana luego de viajar a Cuba.

"Sería bueno un reconocimiento público del intervencionismo de Estados Unidos", opinó el dirigente de 84 años, distinguido con el premio Nobel de la Paz en 1980, que Obama obtuvo en 2009.

Según sostuvo "Estados Unidos siempre consideró al continente como su patio trasero y le impuso políticas de dominación. Hasta el día de hoy hay bases militares norteamericanas en todo el continente".

Después de una histórica visita a Cuba, Obama estará en Argentina el 23 y 24 de marzo, fecha esta última cuando se cumplen 40 años del inicio de una sangrienta dictadura cuyas heridas todavía duelen en la sociedad argentina.

Ante la susceptibilidad que provocó la visita en esta fecha, Estados Unidos anunció la desclasificación de documentos militares y de inteligencia sobre este oscuro capítulo argentino.

"En este aniversario y más allá, estamos convencidos de hacer nuestra parte, mientras Argentina sigue sanando y avanza hacia adelante como una nación", señaló la jefa del Consejo de Seguridad Nacional, Susan Rice.

La presencia de Obama en esa fecha emblemática molestó a organismos defensores de derechos humanos, entre ellos Madres de Plaza de Mayo que buscan a sus hijos desaparecidos y las Abuelas que bregan por hallar unos 500 bebés, hoy adultos, robados al nacer por la dictadura, de los cuales lograron encontrar 119.

Del rechazo se pasó a la indignación cuando el gobierno de centroderecha del presidente Mauricio Macri especuló con una visita de Obama a la exEsma, donde funcionó la mayor cárcel de la dictadura hoy convertida en Espacio de la Memoria.

La presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto lo calificó como "una provocación" y Pérez Esquivel recordó que allí se ejecutaron prácticas de tortura "aprendidas en academias militares de Estados Unidos".

"80 mil militares (de Argentina y otros países de América Latina) pasaron por la Escuela de las Américas en Panamá y otras academias militares de Estados Unidos", sostuvo.

Pérez Esquivel consideró que a Estados Unidos le cabe un mea culpa por la sangre derramada en otras dictaduras que asolaron la región.

"El golpe militar en Chile (1973) fue promovido por Estados Unidos, el de Brasil en 1964, y estuvo detrás de la doctrina de la Seguridad Nacional y el Operativo Cóndor (de coordinación represiva) que se implementó en todo el Cono Sur", detalló.

Pérez Esquivel, como presidente del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj) le escribió a Obama una carta pública a comienzos de marzo cuando la Casa Blanca anunció la visita oficial.

"No vienes a Argentina en cualquier momento", le advirtió.

"Tú vendrás a mi país el mismo día que se cumplen 40 años de la última dictadura genocida de Argentina, y en el año en que se cumplen 200 años de nuestra independencia nacional. Ciertamente no puedes desconocer que tu país tiene muchas deudas pendientes con el nuestro y con muchos otros", le escribió a Obama.

Semanas después de aquella carta, sintió que Obama escuchó su petición con la decisión de marcharse el 24 de marzo a San Carlos de Bariloche, 1.600 km al sur de Buenos Aires, lejos de las marchas que se realizarán en la capital.

"Me parece una decisión correcta para no interferir en la memoria del pueblo el día 24", dijo Pérez Esquivel en rueda de prensa.

Según la agenda oficial, antes de partir a la Patagonia, Obama visitará con Macri otro lugar de homenaje a las víctimas de la dictadura, menos brutal que la exEsma.

Se trata del Parque de la Memoria, un cenotafio con la inscripción de los nombres de miles de desaparecidos a orillas del río de La Plata, adonde cientos de ellos eran arrojados vivos en los llamados 'vuelos de la muerte'.

Pérez Esquivel saludó la decisión de Washington de desclasificar archivos sobre la dictadura argentina, una petición de larga data de los organismos defensores de los derechos humanos.

"Esperamos que pueda aportar para el juicio y castigo a los culpables", dijo.

Estados Unidos ya desclasificó en 2002 unos 4.000 documentos sobre la dictadura argentina, aunque en esta ocasión incluirá por primera vez archivos militares.

Sin embargo Pérez Esquivel espera más de Obama, aunque piensa que está condicionado.

"Creo que Obama llegó al gobierno pero no al poder. Hay cosas que no puede hacer, como levantar el bloqueo a Cuba o cerrar los centros de tortura, porque eso depende del Congreso. Hay cosas que el presidente por sí mismo no puede lograr por más buena voluntad que ponga", dijo.