Ecuador y Perú acuerdan aumentar la potencia de su interconexión eléctrica

El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, y su homólogo peruano, Pedro Pablo Kuczynski, acordaron este viernes aumentar la potencia de la interconexión eléctrica con la construcción de una nueva línea en la frontera binacional, en la primera reunión entre ambos mandatarios.

"Hemos decidido, ir adelante con la interconexión eléctrica de 500 kilovoltios, en vez de la conexión actual de 220, eso va a mejorar mucho las posibilidades de integración energética entre los dos países", declaró el mandatario peruano al salir de la reunión en la ciudad amazónica de Macas (sur de Ecuador).

"En este gabinete se ha destrabado la interconexión de 500 kilovoltios, eso permitirá a Ecuador enviar energía hasta Chile y permite al Perú generar ingresos por venta de servicios, la transmisión a través de su territorio", dijo por su parte el mandatario ecuatoriano.

"Además, permite complementarse, si Ecuador tuviera un problema energético recibiría energía de Perú y viceversa", agregó Correa.

Ecuador aumentó este año su exportación de electricidad con la entrada en funcionamiento de la central hidroeléctrica de Coca Codo Sinclair (este) y Sopladora (sur), dos de las ocho centrales impulsadas bajo la administración de Correa, en una apuesta por cambiar la matriz energética.

Cuatro de ellas ya operan y producen el 85% de energía renovable. El resto lo hará desde 2017.

Ambos mandatarios se reunieron por primera vez desde que Kuczynski asumió el cargo en el X Encuentro Binacional Ecuador-Perú, que será el último de Correa como presidente, cuyo mandato finaliza en mayo de 2017.

En el encuentro abordaron temas de seguridad fronteriza, tráfico de droga, conectividad y salud, y se refirieron también al tema del desminado en la frontera.

Perú y Ecuador se vieron envueltos en tres enfrentamientos armados -en 1941, 1981 y 1995-, ocasionados por un centenario conflicto fronterizo que concluyó con la firma de acuerdos de paz en Brasil en octubre de 1998, que preveía acciones conjuntas para el desminado en la selvática frontera de 1.500 km.

"Es por primera vez en la historia, que dos países que mantuvieron un conflicto, ahora en conjunto trabajan labores de desminado", aseguró Correa.

Los acuerdos bilaterales prevén desminar un área de casi 229 km2 hasta 2017.