Iberdrola cerró 2016 con un impacto económico de 580 millones euros en la Comunidad y una inversión de 100 millones

Iberdrola cerró el ejercicio 2016 con un impacto económico de 580 millones de euros en Castilla y León donde realizó compras por más de

240 millones a cerca de 900 empresas castellanoleonesas e invirtió alrededor de 100 millones de euros.

Según sus datos, el impacto fiscal de la actividad económica de Iberdrola superó los 160 millones de euros en Castilla y León, los salarios y otras retribuciones alcanzaron los 75 millones y la plantilla asciende a cerca de 1.100 personas.

Iberdrola ha adelantado estos datos con motivo de la celebración este viernes del Día del Accionista de Iberdrola en el que el presidente del grupo, Ignacio Galán, ha destacado su modelo empresarial de largo plazo, "capaz no sólo de conseguir resultados económicos sino de generar progreso y bienestar en nuestro entorno a través del fomento del tejido empresarial con compras, inversiones y creación de empleo y cuyo objetivo último es dar un suministro energético de calidad sin descuidar el respeto al medio ambiente".

Según sus datos, Castilla y León es una de las que más proveedores ha aportado en 2016 a Iberdrola y entre los contratistas castellanoleoneses de la compañía más activos en 2016 figuran empresas como Enusa, Unión Minera del Norte, Administración, Organización y Control de Proyectos, Eugenio Álvarez del Collado, Ecología y Espacio, Tecinsa, Talleres Norte Palencia, Marval Seguridad Integral, Transformadores Gedelsa, Cuarta Esfera, Servitec Medioambiente, Royba 98, Talartos, Construcciones y Montajes Metálicos Guardo o Madison.

Además, Iberdrola tiene previsto centrar sus esfuerzos en 2017 en el desarrollo del proyecto de implantación de las redes inteligentes en la Región, "un despliegue que ha supuesto ya la reforma de 8.800 centros de transformación y la sustitución de 1,28 millones de contadores tradicionales por los nuevos equipos dotados de telegestión en toda la región, con potencia contratada igual e inferior a 15 kilovoltios (kV), cerca del 85 por ciento de todo su parque de contadores en la Comunidad".

Iberdrola ha explicado al respecto que el proyecto STAR (Sistemas de Telegestión y Automatización de la Red) va a permitir modernizar la infraestructura eléctrica de Iberdrola e impulsar la economía de la Comunidad a través de contratos con empresas locales y una mayor

contratación de personal cualificado.

La inversión de Iberdrola en esta iniciativa en Castilla y León alcanzará los 180 millones de euros de modo que en 2018 los más de 1,5 millones puntos de suministro a los que la empresa da servicio en la Región tendrán contadores inteligentes y sus más de 15.360 centros de transformación también funcionarán con esta tecnología.

Iberdrola ha asegurado que seguirá reforzando sus instalaciones tradicionales de distribución para mejorar la calidad de suministro en Castilla y León y ha recordado que en 2016 mejoró un 9,5 por ciento el

servicio que ofrece a sus clientes en la Comunidad respecto al ejercicio anterior, "el mejor registro de los últimos cuatro años".

Otras iniciativas reseñables se centran en el ámbito de la I+D como la colaboración con Arbórea Intellbird, S.L. La compañía invirtió en 2013 en esta empresa salmantina a través de su fondo de capital riesgo Perseo y desde entonces Arbórea se ha convertido en un "aliado en el desarrollo de nuevas tecnologías" para la revisión y el mantenimiento de sus aerogeneradores eólicos, "sector en el que Iberdrola fue pionera en 2001 y en el que sigue siendo líder mundial a día de hoy".

Esta apuesta por el emprendimiento y el tejido industrial de la Región se ha materializado en el desarrollo de la plataforma Aracnocóptero, compuesta por un helicóptero plegable multirrotor capaz de comprobar el estado de las palas y analizar y almacenar la información para mejorar el mantenimiento de los mismos.

Dados los "buenos resultados" de la utilización de este tipo de dispositivos, la compañía está ampliando el abanico de posibilidades de uso de los drones y ha comenzado proyectos piloto de revisión de torres

de telecomunicaciones y también de canales de infraestructuras hidráulicas en centrales de generación hidroeléctrica.

También ha destacado la "permanente colaboración" de la compañía con las universidades y la concesión de becas a estudiantes e investigadores de Castilla y León así como el apoyo a proyectos empresariales innovadores a través del Parque Científico de la Universidad de Salamanca (USAL), que ya supera los 800 empleados y un

nivel de ocupación del 100 por ciento.

Estas instalaciones albergan la ampliación del Centro de Innovación Tecnológico de Aldeatejada, impulsado por Iberdrola "donde se

realiza un trabajo de vanguardia en la materia". Asimismo, el pasado año se constituyó la Cátedra Iberdrola VIII Centenario de la USAL, la

primera de las Cátedras VIII Centenario incluidas dentro del Programa de Excelencia de la Universidad, cuyo objetivo prioritario es impulsar la investigación en el área de la energía y la sostenibilidad.

La segunda fase del Plan Románico Atlántico, proyecto de cooperación transfronteriza para la Conservación del Patrimonio Cultura desarrollado por Iberdrola junto con la Secretaría de Estado de Cultura de Portugal y la Junta de Castilla y León, avanzó a "buen ritmo" y potenció el crecimiento socio-económico sostenible del territorio a partir de sus

propios recursos, "las gentes que lo habita, su entorno natural y su patrimonio cultural".

Para lograrlo, el Plan se ha centrado en tres líneas de actuación fundamentales: intervenciones integrales que facilitan no solo la restauración sino también la conservación preventiva y la

gestión eficaz de los bienes; el diseño e implantación de un plan de gestión cultural y turística, basado en la creación de una red de trabajo público-privada y, finalmente, el desarrollo de actividades de difusión y promoción.