La cifra de negocio del dueño de marcas como Moët & Chandon, Loewe, Louis Vuitton, Marc Jacobs, Christian Dior, Sephora, Bulgari o TAG Heuer, entre otras, alcanzó los 37.600 millones de euros, un 5,4% más que un año antes, con un incremento de ingresos en todas sus divisiones.
En términos orgánicos, que excluyen el impacto del cambio de moneda y mantienen constante el perímetro de la compañía, el incremento de las ventas respecto a 2015 se incrementa hasta el 6%.
"LVMH ha conseguido un rendimiento excelente en 2016 en un contexto de inestabilidad geopolítica y económica", celebró el presidente y consejero delegado del grupo, Bernard Arnault, que añadió que, a pesar de que el escenario global se mantenga "incierto", el "atractivo" de las marcas de LVMH, junto a la "agilidad" de los equipos contribuirá a fortalecer la posición de liderazgo de la compañía.
En el cuarto trimestre, la facturación del grupo galo se incrementó un 9%, hasta 11.274 millones de euros, mientras que el crecimiento orgánico en este periodo se situó en el 8%.
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