El fabricante finlandés de motores marinos Wärtsilä reveló el lunes haber detectado manipulaciones de datos de consumo de carburantes en equipos fabricados por la firma en Italia.
Una auditoría interna ordenada por la dirección del grupo permitió detectar "discrepancias en algunas pruebas de mediciones de consumo [de carburantes] de los motores marinos en el centro de distribución de Wärtsilä en Trieste, Italia, antes del envío a los clientes", precisó la empresa.
"Las discrepancias son en promedio de 1% del consumo de carburante. Un 2% de la entregas de Wärtsilä podría haber sido afectado" por esa manipulación, agregó.
La empresa asegura que esas manipulaciones son obra "de un número limitado de empleados, que actuaron claramente contra las instrucciones sobre su trabajo y contra el código de conducta" corporativo, para modificar los resultados de las pruebas de consumo.
El fabricante se abstuvo de dar precisiones sobre el tipo de sanciones que reserva a los contraventores.
Destaca en cambio que sus motores cumplen con las normas vigentes y asegura que la incidencia de las manipulaciones será "marginal" para sus clientes.
Numerosas empresas ordenaron auditorías internas después de que se destapara en septiembre pasado el escándalo de los motores diésel de Volkswagen.
La multinacional automovilística, considerada hasta eses momento como un dechado de virtudes de la industria alemana, admitió haber trucado 11 millones de vehículos diésel en el mundo, con el fin de burlar las mediciones de sus emisiones contaminantes.
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