Vitoria, 30 jun.- Las asambleas de las cajas BBK y Vital han aprobado esta tarde la conversión de ambas entidades en fundaciones bancarias, un proceso que ha contado en la caja vizcaína con un respaldo del 86 % y del 68,2 % en la alavesa.
Además, en ambas asambleas se han elegido a los 15 miembros de los dos patronatos que a partir de ahora dirigirán estas fundaciones.
La nueva fundación bancaria Bilbao Bizkaia Kutxa cuenta con un patrimonio neto de 2.774 millones, el formado por las 1.140.000 acciones de Kutxabank (el 57 % del capital de banco vasco) que poseía la BBK. La fundación bancaria Caja Vital Kutxa mantendrá el 11 % de su participación en el citado banco.
La obra social de la entidad vizcaína tendrá este año un presupuesto de 33,7 millones y la de la Vital ascenderá a 4,9 millones.
La conversión de ambas entidades ha contado con el apoyo de PNV, PSE-EE, PP y del sindicato CCOO y la oposición de EH Bildu, ELA y LAB.
En la BBK ha habido 61 votos favorables, 8 en contra y 1 abstención, mientras que un compromisario no ha votado. En la Caja Vital han votado a favor 45 de los 66 miembros presentes, 11 en contra y 10 abstenciones.
La oposición a la conversión se ha visualizado en la concentración que ha tenido lugar ante la sede de la caja vizcaína en Bilbao coincidiendo con la entrada de los asambleístas.
Los concentrados han proferido continuos gritos como "ladrones" cada vez que entraba un asambleísta, "Kutxabank desahucia y asesina" o "no a la privatización".
El presidente de la caja y ahora fundación BBK, Xabier Sagredo, ha asegurado que esta transformación "no cambiará la filosofía de BBK". "Mañana será como hoy", ha resumido.
En una nota de prensa, la Vital ha afirmado también que su transformación en fundación "no tendrá efecto alguno en la actividad" que la entidad venía desarrollando "para el bienestar de la sociedad alavesa a través de su obra social".
Este proceso de conversión responde a la obligación legal que tienen las tres cajas vascas, BBK, Vital y Kutxa de dejar de ser públicas este año y transformarse en fundaciones, sin que puedan tener más del 50 % del capital de Kutxabank.
La oposición de EH Bildu a este proceso y de los sindicatos abertzales ha provocado que en la Kutxa guipuzcoana, territorio en el que gobierna la coalición soberanista, este proceso vaya con retraso y todavía no haya optado por convertirse en fundación.
En caso de que Kutxa no se convierta en fundación antes de terminar este año, el proceso tendría que hacerse de igual manera, sólo que lo llevaría adelante un "protectorado", que en este caso sería el Gobierno Vasco.
La decisión adoptada hoy en BBK y Vital significa que a partir de ahora las nuevas fundaciones bancarias se regirán por unos patronatos compuesto por 15 miembros.
La ley obliga a que estas personas sean especialistas y con conocimientos financieros.
En la BBK, nueve de los patronos elegidos han sido propuestos por el PNV, tres por los socialistas, uno por el PP, otro de CCOO y el último un independiente.
En la Vital, el PP ha propuesto a 8, el PNV a 4, el PSE a 2 y CCOO a uno.
Xabier Sagredo (PNV) y Fernando Aránguiz (PP) continuarán en sus cargos de presidentes de BBK y Vital, respectivamente.
A partir de ahora, los nuevos patronatos deberán elaborar un plan financiero que demuestre que la futura fundación podrá cubrir las necesidades de capital de Kutxabank si fuera necesario.
Además deberán decidir si quieren mantener el porcentaje de control del banco -ahora es del 100 % entre las tres cajas- y constituir un fondo de reserva.
En la actualidad, la BBK tiene el 57 % de las acciones de Kutxabank, la Kutxa el 33 % y la Vital el 11 %.
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