El índice Dax 30 de Fráncfort perdió 0,78%, el CAC 40 de París 0,11%, el FTSE Mib de Milán 0,49% y el Ibex 35 de Madrid 0,51%.
El índice Footsie-100 de Londres cerró en cambio con un alza de 0,65%.
El acuerdo de congelación de la producción de crudo entre Arabia Saudí, Rusia, Catar y Venezuela decepcionó a los mercados globales, pero permitió valorizaciones de las compañías del sector, que apuntalaron a la plaza londinense: así, BP subió un 1,4% y Royal Dutch Shell un 1,6%.
Los parqués habían empezado la sesión con buenos auspicios, alentados por los resultados del lunes y del viernes pasado, pero hacia media jornada el impulso ya daba señales de agotarse.
Los mercados reaccionaron así con bastante indiferencia al acuerdo petrolero, dado que cifraban sus expectativas en un recorte de la producción, y no en una mera congelación, a fin de revertir el derrumbe de los precios del barril en el último año y medio.
La iniciativa, que prevé mantener la producción en los niveles de enero, está supeditada además a que los otros grandes productores se sumen a ella.
"Es solo un recorte, que no podrá equilibrar el mercado de forma inmediata", dijo Renaud Murail, gerente de Barclays Bourse.
El ánimo de los operadores se vio además afectado por la publicación del índice de confianza ZEW de los inversores alemanes, que en febrero llegó a su mínimo desde octubre de 2014.
Los mercados financieros han registrado pérdidas de gran magnitud desde inicios de año, en una coyuntura marcada por las incertidumbres relacionadas con la desaceleración de China, la debilidad del crecimiento en Estados Unidos, la situación de los bancos europeos y la caída del precio del petróleo.
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