Díaz Ferrán cree que en breve estará resuelta su deuda con Caja Madrid

Madrid.- Caja Madrid estudia desde hoy cómo puede incluir las nuevas garantías presentadas por los propietarios del Grupo Marsans, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, en las condiciones del crédito impagado de 26,5 millones, por lo que ambos empresarios confían en que en breve todo estará resuelto.

Según informaron a Efe fuentes próximas a Díaz Ferrán, Caja Madrid aceptó en la tarde de ayer las garantías ofrecidas -que no quisieron concretar- por Gonzalo Pascual al director general de Negocio de la entidad financiera, Matías Amat.

Esta aceptación, explicaron, no se materializó ayer en un acuerdo entre ambas partes debido a que los servicios de la entidad financiera que aún preside Miguel Blesa tienen que decidir antes de qué forma se pueden recoger esas nuevas garantías en un contrato.

Por lo tanto, añadieron, sólo queda un mero trámite que puede concluir en sólo unos días para que Caja Madrid resuelva el impago del crédito de 26,5 millones concedido al Grupo Marsans, propietario de Air Comet, la aerolínea que cerró en diciembre tras la inmovilización de su flota por decisión de un juez y la incapacidad de afrontar sus deudas.

De cerrarse dicho trámite, Caja Madrid ya no tendría razones para iniciar el proceso de ejecución de los avales presentados por los empresarios, con lo que ambos mantendrán "a buen recaudo" sus patrimonios, según fuentes conocedoras de las negociaciones.

Las mismas fuentes, que desconocen aún cuáles pueden ser las nuevas garantías presentadas ayer, recordaron que una de las últimas propuestas de la entidad era que los empresarios transformaran una concesión de transporte interurbano de Alcalá de Henares (Madrid) en una sociedad, cuyas acciones estuviesen pignoradas por Caja Madrid.

De esta manera, la gestión de la compañía seguiría corriendo a cargo de una de las empresas del Grupo Marsans, mientras que los beneficios previstos de esa concesión permitirían que el préstamo de 26,5 millones se pudiera ir pagando a Caja Madrid durante los próximos 16 años.

Sin embargo, los empresarios habrían rechazado entonces esa propuesta porque la entidad exigía adicionalmente una finca de Gonzalo Pascual.

Pocos días antes del cierre de Air Comet se conocía que Caja Madrid había abierto un expediente al presidente de la CEOE, miembro de su Consejo de Administración en representación de la patronal madrileña CEIM, para que "arreglara o aclarara" por qué no se estaba pagando el crédito de 26,5 millones.

Los estatutos de Caja Madrid recogen que los vocales de su Consejo de Administración no pueden incurrir en impago con la entidad, y si esto sucede se les debe expedientar para decidir si corresponde apartarle de este órgano de gobierno.

Esto último no ha llegado a pasar en el caso de Díaz Ferrán, quien sigue formando parte del Consejo de Administración de la entidad, en el que permanecerá hasta que el próximo jueves el ex ministro Rodrigo Rato llegue a la presidencia de Caja Madrid.

A partir de ese día, la patronal CEIM ya no estará representada por Díaz Ferrán, sino por su actual presidente, Arturo Fernández, al que acompañara también Javier López Madrid, consejero del grupo OHL.