El dropshipping es un modelo de negocio que se hizo popular años atrás y que hoy en día sigue en auge, a través del cual se venden productos sin tener stock. De esta manera, se venden los mismos a través de un proveedor encargado del almacenamiento y de la gestión logística del pedido.
Una de sus principales ventajas es que el vendedor no tiene que disponer de inventarios ni de grandes inversiones iniciales, sino que tan solo hay que limitarse a cerrar una venta. Una vez que esta se produce, el proveedor se encarga de enviar los productos desde su almacén a la dirección del cliente. Tu único trabajo es el de vender y gestionar el contacto con el cliente, que nunca sabrá que tú no eres quién ha hecho el envío.
El dropshipping no es algo nuevo, y ya era utilizado a finales del siglo pasado por diferentes negocios online, por lo que con el paso de los años ha ido evolucionando y adaptándose a las nuevas realidades del mercado. Pese a todo, sigue contando con algunas desventajas, entre las que hay que destacar sus márgenes de beneficio estrechos, logística lenta o disponer de amplios conocimientos para poder alcanzar el éxito.
¿Se puede ganar mucho dinero con el dropshipping?
En internet existen muchos gurús que aseguran impresionantes beneficios mensuales a través del dropshipping, limitándose a destacar todas las ventajas que están asociadas a este modelo de negocio. Sin embargo, la realidad es que, aunque hay emprendedores de todo el mundo que logran tener muy buenos resultados, otros muchos fracasan en su intento.
Un dropshipping bien ejecutado, con proveedores de confianza, puede ser una buena opción de negocio, pero para ello es necesario seguir un largo proceso en el que son muy importantes las pruebas y los errores, para así ir adaptando la estrategia constantemente. Además, el precio de los productos y el margen de beneficio puede cambiar con frecuencia al tratarse de un mercado muy dinámico.
Sobre el papel puede parecer una buena oportunidad para iniciar un nuevo negocio, pero tener una tienda bajo este formato, por norma general, no permite ganar tanto dinero como dicen. De hecho, las probabilidades de ganarte la vida con este tipo de modelo son muy reducidas, menos de las que te imaginas.
Todo ello tiene que ver con que el dropshipping es muy complejo, un modelo de negocio en el que se necesita localizar uno o varios productos que sean originales y atractivos, además de negociar con un proveedor fiable y serio que, además, sea capaz de ofrecer un margen de beneficio razonable.
Posteriormente, hay que montar una tienda online que sea profesional y genere confianza para poder vender tus productos, y luego crear, optimizar y gestionar campañas de publicidad para conseguir atraer a visitas hacia tu web, la cual, por otro lado, debe estar adaptada a la legislación europea de protección de datos.
Más allá de todos estos pasos, será tu responsabilidad gestionar las quejas y reclamaciones de los clientes, que recurrirán a ti en el caso de que surja algún tipo de problema con su producto, pudiendo llegar a resultar complicado responder ante ellos cuando estos son ajenos a ti, como, por ejemplo, cuando tienen que ver con la logística del envío, que va a cargo del proveedor.
De esta forma, aunque es posible obtener ganancias con este modelo de negocio, no será sencillo ni rápido alcanzar el éxito.
