El ex director de tributos ve un "error" incrementar la plantilla de la agencia tributaria "sin renovar la estrategia"

Jesús Gascón, ex director general de Tributos e inspector de Hacienda del Estado, considera que sería un “error” plantear “simplemente” el crecimiento de la plantilla de la Agencia Tributaria “sin renovar la estrategia y con un enfoque continuista basado en intentar superar los resultados del año anterior”.
Así lo expone en un artículo del último número de la publicación ‘Papeles de economía española’ que realizada la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas).
“Lo que tenemos que plantearnos es si estamos en condiciones de dar un salto cualitativo en la lucha contra el fraude y en la adaptación de la administración tributaria a los nuevos retos”, señaló el que fuera director general de Tributos con el PSOE.
En este sentido, Gascón afirmó que “no se trata de propugnar planteamientos rupturistas, inviables en momentos de incertidumbre como el actual, sino de poner en marcha una estrategia de cambio a medio y largo plazo”.
El objetivo, destacó, es que la nueva estrategia “potencie los aspectos positivos de la organización y que ayude a afrontar sus puntos débiles”.
Según el inspector de Hacienda, hay que distinguir entre las líneas de actuación “tradicionales” de la Agencia Tributaria y las “nuevas” que se pueden llevar a cabo para dar un “salto cualitativo”.
Entre las primeras líneas, recuerda Gascón, se encuentran: información y asistencia al contribuyente, administración electrónica, controles masivos, inspecciones basas en criterios tradicionales y la gestión recaudatoria y aduanera.
Todas ellas deberías actualizar y mantenerse, dice el ex director general de Tributos, para añadir que es necesario que “la plantilla dedicada a estar tareas no decrezca”.
Por su parte, entre las líneas complementarias que pueden suponer un “salto cualitativo” en la gestión de los tributos y que “avalarían que se incrementarse la plantilla” para llevarlas a cabo están el diseño de una infraestructura para integrar la red estatal y no estatal de la administración tributaria, aumentar las actuaciones cualificadas de lucha contra el fraude o impulsar actuaciones preventivas.
Además, apuesta por un “incremento significativo” del número de actuaciones de control respecto a los segmentos de contribuyentes en los que la percepción de riesgo es “muy baja”.
En conclusión, apunta el inspector de Hacienda, “el estudio de un posible nuevo modelo organizativo y del adecuado dimensionamiento de la plantilla debería enmarcarse en la nueva planificación estratégica de la organización y se sus prioridades”.