González dice que el debate sobre la sucesión de Zapatero no es "muy consistente"

Madrid.- El ex presidente del Gobierno Felipe González ha considerado hoy que José Luis Rodríguez Zapatero seguirá siendo el candidato del PSOE a la Presidencia en 2012, y ha añadido que el debate sobre su sucesión "no es, por el momento, muy consistente".

González ha dicho, en declaraciones a TVE, que no ha hablado con Zapatero de esta cuestión y ha añadido que, si lo hubiera hecho, significaría que el jefe del Ejecutivo se "estaría planteando" no presentarse a la reelección.

Se ha referido a la encuesta que publicó el diario El País sobre este asunto, y ha dicho que no cree "que haya ningún indicador que aconseje" que Zapatero "no sea candidato".

"Si el sondeo está bien hecho y la mayoría de los votantes o de los militantes socialistas lo creen, pues estoy en la minoría", ha apostillado.

Ha recalcado que la situación económica o el paro no descalifican "en absoluto" al Gobierno para liderar en la Unión Europea la salida de la crisis y ha recordado que España "sigue estando por debajo de la media" de los países europeos en endeudamiento público.

Tras señalar que "la recesión mundial, y no es poco, ha logrado evitarse" y ahora hay que "superar la crisis", ha asegurado que el hecho de que España lo haga "cuatro o cinco meses después no es el elemento decisivo".

A su juicio, hay que adoptar medidas para evitar "que estemos incubando la siguiente crisis financiera", lograr mayor coordinación de las políticas económicas en la UE y, en España, afrontar una reforma de un mercado de trabajo "dramáticamente segmentado" entre contratados fijos, inmigrantes y jóvenes.

Ha recordado que "gobernar es priorizar la acción de gobierno sobre los problemas reales, más que intentar imaginar problemas nuevos pero no existentes, como el debate sobre la identidad en Francia".

Ha señalado que Europa tiene instrumentos jurídicos e institucionales suficientes con el Tratado de Lisboa, que no hace falta "seguir manoseando", y que lo que "hace falta" es "impulsar la voluntad política" para afrontar el desafío de hablar realmente con una sola voz en el mundo.

"Si esa conciencia no existe y hay un repliegue nacionalista como el que llevamos viviendo en los últimos años, no nos harán caso", ha indicado González quien ha considerado que es lo que ocurrió a la UE en la Cumbre contra el Cambio Climático de Copenhague.